Un científico del gobierno de Kenia afirmó haber encontrado una nueva droga que alivia los síntomas del sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida), generando gran publicidad por un lado y gran escepticismo por otro.
La nueva droga del profesor Arthur Obel es Pearl Omega, que fue promocionada como un avance decisivo hacia la cura del sida por un importante periódico local.
Obel estuvo vinculado al desarrollo de la droga Kemron en 1989, que en su época fue promovida en Kenia como una panacea y finalmente resultó ineficaz para curar el sida, aunque contribuye a aliviar los síntomas.
El investigador ofreció este lunes una conferencia en la Facultad de Medicina de la Universidad de Nairobi para responder a las críticas y aclarar las dudas.
En lugar de promocionar a su droga como la nueva panacea, Obel acusó a la prensa de "poner palabras en la boca de la gente" y luego aseguró que no existe cura para el sida. Pearl Omega solamente controla los síntomas de la enfermedad, aclaró.
"Mi función consiste en aliviar el sufrimiento y prolongar la vida de los enfermos de sida", dijo a la audiencia, compuesta principalmente por estudiantes de medicina e investigadores.
Ndinya Achola, jefe del Departamento de Microbiología de la Facultad de Medicina, preguntó si es cierto que siete de los 32 portadores del virus del sida que tomaron la nueva droga se "negativizaron" tras un período de 18 meses, como había asegurado Obel.
Sin entrar en detalles, el científico simplemente afirmó que los pacientes que tomaron Pearl Omega "se encuentran vivos y en buen estado".
Durante la conferencia, Obel extrajo una botella con una muestra de Pearl Omega, pero se negó a divulgar su composición química y la forma en que funciona.
"Comencé a usarla en 1991 en pruebas clínicas. Es muy fácil convertir el líquido en tabletas, cápsulas, jalea o inyectable, pero obtengo mejores resultados con la forma líquida", explicó.
Obel afirmó que suministra a sus pacientes 250 mililitros durante 30 días, seguida de una dosis diaria de mantenimiento de 50 mililitros, que según él produce buenos resultados. "Pearl Omega mantiene la piel saludable", aseguró.
En un país como Kenia, donde cinco por ciento de la población está infectada con el virus del sida, cualquier promesa de cura, por más falsa que sea, probablemente encontrará muchos compradores.
Sin embargo, el gobierno, que en el pasado promocionó a la droga Kemron, esta vez intentó desalentar las esperanzas. La semana pasada, el presidente Daniel Arap Moi sostuvo que no existe cura para el sida y exhortó a los kenianos a comportarse "moralmente".
Así mismo, Basil Criticos, viceministro de Salud, dijo a un diario local que Pearl Omega es sólo una de varias drogas que se utilizan para aliviar los síntomas del sida.
"La droga debe someterse a pruebas minuciosas durante al menos tres años para su aprobación", así como los medicamentos que ya han sido certificados en otros países, señaló Criticos.
"Esas drogas incluyen Kemron, Immunex, AZT, PMC-4 y, más recientemente, Pearl Omega. De estas, Kemron y Pearl Omega fueron desarrolladas por investigadores kenianos", destacó Fares Kuindwa, secretario del gabinete y jefe del servicio público.
Kuindwa sostuvo que el gobierno continuará apoyando las iniciativas locales en un esfuerzo mundial por encontrar una cura para el sida, y exhortó a los investigadores a observar estrictamente la ética profesional. (FIN/IPS/tra- en/mn/oa/ml/he/96)