ITALIA: El museo Puskin de Moscú se traslada a Milán

Una muestra sobre el arte impresionista, compuesta por 60 cuadros de maestros como Monet, Manet, Picasso, Cézanne, Renoir, Van Gogh, prestados por el museo Puskin de Moscú, se presenta en el Palacio Real de Milán.

Se trata de 60 obras maestras, como la Catedral de Rouen de Claude Monet, la Bailarina de Edgard Degas, el Arlequín de Pablo Picasso, la Danza de Henri Matisse, el autorretrato de Paul Gauguin, además de 25 obras gráficas de impresionistas y posimpresionistas franceses.

Por razones de seguridad, las obras, aseguradas en 700 millones de dólares, desembarcaron en cuatro aviones distintos en el aeropuerto de Milán, donde por más de cuatro meses (hasta el 30 de junio) podrán ser visitadas.

La directora del museo Puskin, Irina Antonova, señaló que ese centro cuenta con "560.000 obras de todas las culturas, desde la antigüedad a nuestros días, pero la galería más amada y frecuentada es la de los impresionistas y los posimpresionistas".

La exposición, que comenzó el 15 de febrero, fue financiada por el estilista de moda Giorgio Armani, quien siempre se ha interesado por la actividad cultural de Milán. Armani otorgó tres millones de dólares para el transporte, pago de seguros, preparación y catálogo de la muestra.

De esta manera, la primavera milanesa florecerá este año con colores diversos, los colores mágicos de los impresionistas, que pintaban campos de amapolas, jardines y escenas de la vida al aire libre, lleno de sol, basándose en la impresión suscitada por el color y la luz.

No será fácil volver a ver en Italia cinco Monet, tres Renoir, cinco Cezanne y las obras maestras de los grandes posimpresionistas que recogieron su herencia, como Gauguin (de quien se exhiben cinco obras), Van Gogh (dos), Matisse (tres) y Picasso (cinco).

Paolo Biscottini, director del Palacio Real, contó que las pinturas pertenecieron a dos coleccionistas rusos, quienes las compraron entre 1897 y 1936: Sergej Sukin e Iván Morozov.

Sukin, un mongol, en 15 años, sin la ayuda de nadie, compró 221 obras maestras de los impresionistas y posimpresionistas, entre los cuales Monet, Renoir, Cezanne, Degas, Matisse y los Picasso del primer período.

Articulada en 14 salas, la muestra se abre con cinco obras de Monet, que introducen de inmediato al visitante en la mágica atmósfera impresionista.

El pintor francés intentó durante toda su vida transmitir sus sensaciones frente a la naturaleza y fue el primero en decir que el pasto no era necesariamente verde, podía aparecer amarillo o azulado según la luz o su propio estado de ánimo.

Un ejemplo de esta nueva concepción fue La catedral de Rouen en el atardecer, de la cual Monet hizo 20 versiones, todas ligeramente distintas, en base a la hora del día y a su humor.

En otras salas hay ejemplos de posimpresionismo, de Henri de Toulouse Lautrec, Pierre Bonnard, Raoul Dufy, André Derain.

Los desarrollos del impresionismo en dirección cubista, con Braque y Piccaso, cuyo Arlequín es uno de las obras maestras de este siglo, ponen fin a la muestra. (FIN/IPS/jp/dg/cr/96).

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe