A cinco dias de haber sido penalizado por Estados Unidos por su presunta insuficiencia en la lucha contra el narcotráfico, el gobierno de Colombia destacó hoy como un logro en ese plano la muerte del tercer hombre del cartel de Cali, José Santacruz.
El narcotraficante fue abatido la noche de este martes en la ciudad noroccidental de Medellín por el mismo grupo élite de la policía que en diciembre de 1993 mató a Pablo Escobar, jefe del exterminado Cartel de Medellín.
Santacruz había sido detenido el 4 de julio de 1995 y fue ultimado 55 dias después de haberse fugado de la cárcel capitalina de La Picota en circunstancias aún no aclaradas.
Para el presidente Ernesto Samper, el operativo ratificó la voluntad "inquebrantable" de su gobierno de "seguir luchando contra el narcotráfico, especialmente ahora que el pais ha sido objeto de incomprensión internacional", en razón de su reciente "descertificación" por Estados Unidos.
En alusión a la actitud de Washington, el mandatario manifestó no obstante que ésta es la oportunidad para que la comunidad internacional entienda que el narcotráfico no es un problema exclusivo de Colombia y que para combatirlo se necesita de la "mano de los gobiernos amigos".
Para Samper, el operativo policial representó "una reivindicación" que compensa el "sentimiento de depresión" que los colombianos vivieron estos últimos dias tras la condena estadounidense.
El ministro del Interior, Horacio Serpa, afirmó que la muerte de Santacruz a manos de la policia es una demostración de que el gobierno nacional, "a pesar de la descertificación", que "no merecía", continuará "la lucha contra el delito, contra la corrupción y específicamente contra el narcotráfico".
Serpa se mostró confiado en que con esta noticia, el Congreso estadoinidense, que dispone de 30 dias para confirmar o modificar la decisión de descertificar a Colombia, reconsidere esa sanción.
"Ojalá que eso sirva para que se reflexione en esas latitudes (el Congreso estadounidense) y se reconozcan los esfuerzos" que ha hecho Colombia en su lucha contra el narcotráfico, afirmó.
El director de la policía, Rosso José Serrano, manifestó a su vez que Estados Unidos debería reconsiderar su decisión del viernes último y "certificar hoy mismo a colombia".
Rosso y el fiscal general Alfonso Valdivieso fueron los únicos que salieron bien librados en la evaluación que hizo el gobierno estadounidense de la lucha antidrogas de Colombia el viernes último.
El jefe policial indicó que la cooperación estadounidense ha sido importante para la captura de los jefes del nercotráfico, pero aclaró que el operativo que culminó con la muerte de Santacruz "fue una operación ciento por ciento criolla".
El ministro de Relaciones Exteriores, Rodrigo Pardo, se mostró por su lado escéptico respecto a la reacción que pueda tener el Congreso estadounidense tras la muerte del presunto tercer hombre del Cartel de Cali.
Según Pardo, la evaluación de Colombia realizada por Washington "no tuvo en cuenta el desempeño en la lucha contra el narcotráfico sino la crisis política" que vive el país, en función de las acusaciones que pesan sobre Samper de haber financiado su campana de 1994 con fondos del narcotráfico.
En Colombia "hay un problema de narcocorruppción" que se está combatiendo, como lo demuestran las investigaciones que realiza la Fiscalía, dijo.
En la lucha contra el narcotráfico "es mucho más efectiva la cooperacion que el conflicto" y "mucho más efectivas las decisiones multilaterales que las imposiciones unilaterales", agregó.
Sin embargo, Samper pidió este lunes a sus ministros de Defensa y Relaciones Exteriores "revisar y reevaluar" los convenios de cooperación firmados por su país en ese plano.
Santacruz era conocido con el alias de "el estudiante", por la época en que cursó algunos semestres en la facultad de ingienería civil de la Universidad de Los Andes (principal universidad privada).
Los informes policiales indican que sus primeras actividades delictivas se conocieron en 1969, cuando fue detenido por el secuestro de un compa;ero de estudios de la universidad, un empresario y otros dos ciudadanos suyos.
Por sus actividades en el Cartel de Cali figuraba desde 1980 en la lista de los hombres más buscados por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos DEA, tenía cuatro cargos pendientes en ese país por narcotráfico y se le atribuía la muerte del periodista Manuel de Dios Unanue el 11 de marzo de 1992 en Nueva York. (FIN/IPS/yf/dg/ip/96)