HUNGRIA: Discriminacion contra gitanos tiende a agravarse

Pese a los muchos intentos de mejorar la dificil situacion social de los gitanos de Hungria en los ultimos 50 anos, la mayor minoria del pais sufre una discriminacion cada vez mayor.

"Lo primero que se le ocurre a la gente cuando ve a un gitano es que seguramente no le guste trabajar y prefiera ganarse la vida robando", dijo un hungaro no gitano entrevistado por IPS, sintetizando el sentiminto de muchos de sus compatriotas.

Defensores de derechos humanos y observadores opinan que los prejuicios generalizados contra los 500.000 gitanos -tambien llamados cingaros- estan directamente relacionados con las muchas formas de discriminacion que sufren en Hungria.

Asi, por ejemplo, 40 por ciento de las personas acusadas de robo son gitanos -un porcentaje muy superior al que representan los cingaros en la poblacion total-, lo cual seria una de las consecuencias de dichos prejuicios.

"Es inaceptable que, sin conocer los hechos, los gitanos sean acusados de actos criminales", dijo Gabor Fodor, ex presidente de la Comision Parlamentaria de Minorias y Derechos Humanos.

La comision que presidio Fodor tuvo conocimiento de numerosos casos en que policias habian agredido a gitanos sin razon aparente alguna.

Asi, el ano pasado, un cingaro murio como consecuencia de los golpes que le propino un grupo de policias. No obstante, resulta dificil saber si la violencia antigitana aumento en los ultimos tiempos o si se dan a conocer casos que antes se hubieran ocultado.

Por otra parte, los medios masivos de comunicacion agravan la situacion, al reproducir los prejuicios discriminatorios de gran parte de la poblacion.

"Los reportajes o articulos objetivos sobre los gitanos son poco comunes", fustigo Zsolt Csalog, un conocido escritor, productor de documentales y fundador de varios organizaciones no gubernamentales (ONG) que trabajan con cingaros.

Entre esas ONG, se encuentra la Agencia de Informacion Gitana, que procura contrarrestar la parcialidad de parte de los medios masivos de comunicacion.

"La situacion de la minoria cingara es alarmante", indico Miklos Tamas Gaspar, de la Comision de Derechos Humanos de la Alianza de Democratas Libres.

Para Gaspar, el punto de vista de los gitanos se mantiene censurado de hecho y hasta muchos grupos de derechos humanos tienden a "olvidarse" de ellos.

Las dificultades de los gitanos tambien se manifiestan en otros sectores, como lo demuestra su situacion en el mercado de trabajo.

Asi, 70 por ciento de los hungaros gitanos estan desempleados, cuando el promedio nacional es del orden de 12 por ciento, lo cual no puede atribuirse al menor nivel educativo de los cingaros.

"Ni siquiera los gitanos que tienen una buena formacion consiguen trabajo facilmente (…) El problema son los prejuicios", indico Csalog.

Por otra parte, los empleos no calificados, en los que muchos gitanos trabajaban, tienden a reducirse como consecuencia de la transicion hacia la economia de mercado.

En efecto, muchas de las grandes empresas de Estado que los empleaban han dejado de existir por ser consideradas poco competitivas.

En este dificil contexto, cada vez mas familias gitanas solicitan ayudas estatales para subsistir, lo cual tambien tiende a complicar aun mas la educacion de los ninos.

En terminos generales, los ninos gitanos suelen ir mucho menos tiempo a la escuela que los demas, ya que 90 por ciento de los hungaros superan el octavo ano de escolaridad, pero tan solo 4,5 por ciento de los cingaros van mas alla de dicho nivel.

Ademas de las dificultades sociales, una vez mas los prejuicios y la ignorancia perjudican a los cingaros, que asisten a "escuelas donde la mayoria no sabe nada sobre ellos", segun Csalog.

"La mayoria de los maestros hungaros no conoce absolutamente nada de la cultura de los ninos gitanos que tienen a cargo", puntualizo.

"Es un problema serio, porque la experiencia de europeos y estadounidenses muestra que la escuela es el mejor lugar para combatir el racismo y la discriminacion", opino.

Ante este dificil panorama general, algunos observadores empiezan a temer lo peor: "Si la sociedad hungara no es capaz de mejorar la situacion de los gitanos en los proximos anos, podria estallar un conflicto etnico", advirtio un informe de seis ONG difundido el mes pasado. (FIN/IPS/tra-en/kk/rj/dm/pr-hd/96)

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