La masacre de Dili, en 1991, sigue siendo un mono en la espalda de Indonesia, a pesar de los esfuerzos de Jakarta para mejorar su imagen sobre derechos humanos, y su ofensiva diplomatica para resolver el problema de Timor Oriental, que se viene arrastrando desde hace 20 anos.
A pesar que las autoridades sometieron a una corte marcial a los oficiales responsables de la matanza de decenas de manifestantes, durante las demostraciones independentistas de hace cuatro anos, los timorenses opositores a Jakarta abochornan al gobierno cada noviembre porque recuerdan el aniversario del tragico incidente.
En las ultimas dos semanas, estudiantes timorenses han saltado los muros de las embajadas francesas y japonesas, denunciando persecucion por parte de las autoridades indonesias y pidiendo ser enviados a naciones occidentales.
Japan rehuso dar asilo politico a personas con edades entre 19 y 25 anos, si bien Portugal respondio a sus demandas.
Segun el movimiemnto de resistencia anti-indonesio, las acciones estuvieron destinadas a llamar la atencion sobre "el drama olvidado de Timor", en el marco de la reciente cumbre de la Cooperacion Economica Asia-Pacifico (APEC) en Osaka, Japon.
El gobierno nego las denuncias de persecucion y dijo que las acciones son de naturaleza puramente "politica", si bien muchos analistas opinaron que, mas que politica, es una cuestion economica.
"No hay razones para que pidan asilo porque jamas estuvieron bajo algun tipo de presion o tortura, o fueron buscados por las fuerzas de seguridad", asevero Ghaffar Fadyl, director de informacion de la cancilleria indonesia.
El gobierno senalo que habia disminuido su fuerza militar en Timor. Aseguro que Jakarta redujo sus batallones de 10 a seis, con uno solo dedicado a operaciones militares porque el resto forma parte del cuerpo de ingenieros que construye y mejora caminos.
Jakarta tambien aseguro que esta pidiendo la mediacion de la ONU para dialogar con los grupos timorenses anti-integracionistas dentro y fuera de Indonesia, como tambien con Portugal, en busca de una solucion politica.
Indonesia invadio Timor Oriental en 1975, justo cuando el archipielago se independizo de cuatro siglos de dominacion colonial portuguesa y estallo la violencia entre facciones timorenses rivales.
Timor Oriental, una isla en el archipielago de Java donde se instalaron los portugueses en el siglo XVI, fue formalmente anexada por Indonesia en 1976. Esa anexion nunca fue reconocida por las Naciones Unidas.
Desde entonces, las autoridades indonesias han empleado su potencia militar para reprimir el movimiento independentista.
Segun un informe publicado en 1994 por Amnistia Internacional, "dos decadas de genocidio indonesio impune" ha costado la vida de un tercio de los 650.000 habitantes de la isla.
No obstante, muchos analistas aseveran que las autoridades indonesias han ablandado su actitud en Timor Oriental. El gobierno anuncio ahora que no detendra o arrestara a ningun nativo que pretenda dejar el pais.
El canciller indonesio, Ali Alatas, dijo que los solicitantes de asilo solo son jovenes que tratan de obtener un pasaje de avion gratis para salir del pais.
"Es un juego y se esta haciendo un poco tedioso", declaro a la prensa en Osaka. "Nadie los persigue y, una por una, todas las embajadas han rechazado su pedido de asilo", afirmo.
Alatas tambien fustigo a Lisboa, acusando a Portugal de "inercia" en los esfuerzos diplomaticos para encontrar una solucion al problema timorense.
"Necesitamos dos manos para aplaudir y hasta ahora lo hemos estado haciendo con una. La otra mano esta casi inmovil", dijo Alatas, asegurando que estaba deseoso de continuar las discusiones mediadas por la ONU.
El obispo de Dili, Carlos Felipe Jimenes Belo, entretanto, ha urgido al gobierno examinar las razones que oculta la nueva oleada de timorenses que tratan de salir del pais.
Sociologos locales afirmaron que el problema era economico.
El indice de desempleo entre los graduados universitarios timorenses es alto y el problema se ve agravado por el creciente numero de comerciantes que recientemente se instalaron en Timor.
"El gobierno deberia deberia concentrarse en dar empleo y formacion profesional a los jovenes timorenses cuyas expectativas han sido fomentadas por el aumento de centros educativos en la isla para que el problema politico local fuera mas manejable", declaro un sociologo en Jakarta. (FIN/IPS/tra-en-yi/cpg/ego/hd).
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