Las rigidas reglas establecidas en Portugal por el gobierno cesante de centroderecha sobre asilo politico e inmigracion cambiaran sustancialmente cuando los socialistas asuman funciones la proxima semana, revelo hoy una destacada experta en la materia.
A esta conclusion llegaron las organizaciones no gubernamentales (ONG) y los mas reputados expertos en una mesa redonda celebrada este martes, segun revelo este miercoles Cadi Fernandes, la mas conocida analista portuguesa en materia de derechos humanos.
"La mentalidad ministerial cambiara, en especial en lo referente a derecho de asilo", sostuvo la analista, citando al ex proveedor de Justicia Jose de Almeida Ribeiro, uno de los participantes en la reunion, preparatoria de la Conferencia Intergubernamental de 1996.
En la reunion, promovida por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), bajo los auspicios de la Cruz Roja Internacional, participaron las mayores ONG portuguesas que actuan en estos campos.
Fernandes subrayo que el ex diputado del Partido Socialista Alberto Costa, quien asumira como ministro del Interior la proxima semana, "tiene a su favor el haber sido miembro de la Comision Parlamentaria de Derechos, Libertades y Garantias", ademas de haberse destacado como abogado defensor de africanos.
Susana Amador, jurista del Comite Portugues para los Refugiados, senalo que hay que ser realista y "actuar en conformidad con los restantes miembros de la Union Europea (UE)", pero no por eso se debem olvidar los derechos humanos.
En este sentido, recalco que la teoria de la "Europa Fortaleza" defendida por el "nucleo duro" de la UE, no es compartida por Holanda y Dinamarca, "ejemplos externos que hay que tener en cuenta para alterar la ley portuguesa".
Anadio que si bien el pais debe adaptarse a las reglas comunitarias, estas no se deben imponer "perdiendo de vista los principios constitucionales, porque la ley fundamental portuguesa garantiza el derecho de asilo".
En Dinamarca "las ONG participan en el proceso de eleccion de los candidatos a asilo", mientras en Holanda "se establecio un sistema de recepcion y alojamiento de los candidatos, que ha dado excelentes resultados", recordo Amador.
En las peticiones de asilo, los principales escollos radican en la demora en las respuestas y la falta de condiciones minimas para la presentacion de recursos de los candidatos cuando su pedido es rechazado en la primera instancia.
En Portugal "existen procesos con 15 y 20 anos", porque "el gobierno (todavia en funciones) siempre demostro una cierta desconfianza hacia la Comision Europea de Derechos del Hombre, instancia a la cual muchos solicitantes de asilo recurren en otros paises de la UE cuando sus pedidos son rechazados", dijo.
En cifras, existe poca claridad, pero "sabemos que existen centenas de pedidos de asilo y solo unas escasas decenas han sido concedidos", subrayo Fernandes.
El gobierno, por su parte, asegura que Portugal nunca cerro sus puertas a "verdaderos perseguidos politicos", pero en muchos casos, "se verifico que se trataba de inmigracion economica disfrazada", en especial procedente de los paises ex socialistas de Europa Central y Oriental.
En cuanto a la inmigracion, los africanos constituyen casi la mitad del total de trabajadores extranjeros con residencia legal en Portugal, segun se desprende de las cifras divulgadas en junio de este ano por el Instituto Nacional de Estadisticas.
De un total de 157.073 inmigrantes que recibieron permiso de residencia del Servicio de Extranjeros y Fronteras, 46,2 por ciento provienen de Africa, en su inmensa mayoria de las antiguas colonias lusas.
El Instituto Nacional de Estadistica advirtio en la oportunidad que la cifra engloba a "extranjeros con situacion regularizada" hasta el 31 de diciembre de 1994, ya que las ONG locales estiman que a esa cifra se deben sumar entre 70.000 y 80.000 clandestinos.
Casi todos ellos, provienen de los lusofonos Angola, Brasil, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Mozambique y Santo Tome-Principe, reconocen, aunque no oficialmente, altos funcionarios del Servicio de Extranjeros y Fronteras.
Las ONG Oikos, Comite Portugues para los Refugiados y SOS- Racismo, asi como dependencias de la Iglesia Catolica para asuntos humanitarios, han denunciado en varias ocasiones situaciones de ilegalidad forzadas por empleadores que niegan certificado de trabajo a los inmigrantes.
Para un empresario, en especial de la construccion civil, reconocer oficialmente a un inmigrante significa dar igual trato que a un portugues en cuanto a la seguridad social, fondo de pension y salud, ademas de pagarle el salario minimo legal, lo que se traduciria en duplicacion del costo del empleado.
Estos casos fueron mencionados por el propio primer ministro Anibal Cavaco e Silva, que pese a su postura de derecha liberal fustigo a "algunos empresarios inescrupulosos".
De acuerdo con las cifras oficiales, Portugal es uno de los paises de la UE que recibe menos inmigrantes, al constituir estos 1,2 por ciento de la poblacion, de 9,8 millones de habitantes.
En los paises comunitarios, solo Italia y Espana registran cifras inferiores, al constituir las comunidades extranjeras 0,9 por ciento en relacion a sus respectivas poblaciones, mientras a la cabeza se mantiene Luxemburgo, con 32,1 por ciento de inmigrantes.
En los restantes paises de la UE, la relacion de los extranjeros con los nacionales varia entre dos y nueve por ciento.
Tras los africanos residentes en Portugal se colocan los ciudadanos de la UE, con 23,6 por ciento, y luego los latinoamericanos, 15,8 por ciento, de los cuales 81,4 por ciento son brasilenos.
Por paises, el primer lugar lo ocupa Cabo Verde, con 23,3 por ciento del total de los legalizados, seguido de Brasil, que el ano pasado alcanzaba 11,8 por ciento. (FIN/IPS/md/ag/pr/95