La posibilidad de que el Mercosur se convierta en un polo productor de ciencia y tecnologia puede parecer una utopia, pero un serio esfuerzo esta siendo hecho en esa direccion, aunque no siempre llegue al conocimiento de los protagonistas privados del proceso de integracion.
El empresario paulista Michel Alabi, vicepresidente de la Asociacion de Empresas Brasilenas para la Integracion (ADEBI), dio una muestra de ello al ser consultado sobre las perspectivas de desarrollo tecnologico dentro del bloque.
"Las negociaciones que llevaron al Mercosur (Mercado Comun del Sur) fueron presididos por el interes de dividir mercados y establecer ciertas reservas para cada socio, no por la preocupacion de poner al bloque en el camino del intercambio y la creacion de tecnologias", dijo a IPS Alabi.
La observacion parece justificada, si se tiene en cuenta el espacio que los temas de ciencia y tecnologia ocupan en el total de acuerdos y decisiones aprobados hasta ahora en el bloque que conforman Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Sin embargo, no tiene en cuenta un trabajo lento e incipiente que tiene potencialidades enormes, segun tecnicos de la secretaria de Politica Industrial del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo de Brasil.
"El Mercosur es aun algo muy reciente y no ha habido tiempo para avanzar en todos los terrenos al mismo ritmo", dijo el ingeniero Erno Paulinyi, coordinador de Tecnologia y Proyectos Industriales de ese ministerio.
La estrategia adoptada en el area cientifico-tecnologica obedece a una rigurosa logica: hacer un diagnostico de la realidad en los cuatro paises miembros, promover el intercambio de misiones tecnicas que puedan absorber los avances de cada uno y pasar luego a la elaboracion de proyectos conjuntos concretos.
El intercambio ya era una realidad en areas especificas aun antes de la puesta en marcha del Mercosur, como lo demuestran los protocolos firmados entre Brasil y Argentina para la fabricacion conjunta de un avion comercial con tecnologia creada en los dos paises.
Pero hacia falta elaborar un diagnostico completo para saber exactamente en que terrenos la integracion cientifico-tecnologica tiene mejores posibilidades de desarrollo, como punto de partida para un trabajo productivo.
Esa tarea ha sido cumplida gracias a un convenio entre el pacto subregional y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cuyo resultado es el estudio sobre "Promocion y fomento de innovaciones tecnologicas explicitas en la industria manufacturera del Mercosur", concluido este ano.
"La primera constatacion, a partir de ese estudio, es la de que Brasil tiene algunas insuficiencias que nuestros socios, especialmente Argentina y Uruguay, pueden compensar", senalo Paulinyi.
Una de ellas esta relacionada con los recursos humanos. Brasil tiene cerca de 90.000 cientificos e investigadores, numero muy reducido en relacion al tamano de su economia, mientras que Argentina y Uruguay cuentan con investigadores de primera linea que su estructura economica no consigue absorber.
"La creacion de tecnologias depende de una adecuada interrelacion entre la estructura institucional, la existencia de instalaciones y laboratorios, los cientificos e investigadores, la disponibilidad de recursos y la demanda de la industria", dijo Paulinyi.
En el Mercosur se estan dando los pasos para que esos factores sean integrados eficientemente, lo que sin duda producira avances mayores que los que Brasil podria alcanzar solo.
Pero eso no significa que sea necesario esperar a la estructuracion de las nuevas bases institucionales para se comience a obtener resultados.
"En areas como informatica, biologia y aeronautica ya existe, en particular con Argentina, un razonable nivel de integracion y en la siderurgia, Brasil ha desarrollado tecnologias de procesamiento del mineral de hierro que estan disponibles para uso inmediato de nuestros socios", informo Paulinyi.
En el sector de la produccion de celulosa a partir del eucalipto, tradicionalmente de mala calidad, Brasil ha llegado a tecnicas que permitieron equipararla a otras fibras vegetales del mercado internacional, y eso abre nuevas perspectivas a todos los productores del Mercosur.
"Pero el problema del desarrollo tecnologico no puede encararse con mentalidad inmediatista. Tenemos aun que compartir con nuestros socios nuestra experiencia en materia de financiamiento de la investigacion, que es una condicion para el crecimiento", senalo el tecnico brasileno.
"Si conseguimos crear mecanismos que aseguren el financiamiento conjunto de proyectos prioritarios, habremos dado un paso fundamental. Pero tambien lo haremos si solo conseguimos evitar la duplicacion de esfuerzos, financiando al mismo tiempo proyectos paralelos", anadio.
Existen multiples areas en que el desarrollo requiere un preciso conocimiento de los espacios que estan disponibles en el mercado mundial y que los paises del Mercosur estaran en condiciones de llenar, desde el momento en que elaboren la tecnologia adecuada.
Esa tarea de prospeccion de tendencias tecnologicas debe ser la proxima tarea conjunta del pacto subregional, aseguro Paulinyi. (FIN/IPS/rb/ag/sc/95
