Un riguroso silencio mantienen los cuadros activos del Ejercito de Chile en torno al fallo judicial que condeno a penas de carcel al general retirado Manuel Contreras y al brigadier Pedro Espinoza.
El mutismo militar no fue roto ni siquiera por el general Augusto Pinochet, ex dictador y comandante del arma, quien habria dado instrucciones a todo el alto mando de no pronunciarse publicamente sobre el dictamen de la Corte Suprema.
Contreras, jefe maximo de la disuelta Direccion de Inteligencia Nacional (DINA), y Espinoza, su segundo en ese cuepo represivo, fueron sentenciados este martes a siete y seis anos de carcel por el asesinato del ex canciller Orlando Letelier.
El homicidio, cometido en Washington mediante un atentado terrorista el 21 de septiembre de 1976, fue el mayor factor de conflicto con Estados Unidos que Pinochet tuvo durante los casi 17 anos del regimen dictatorial entre 1973 y 1990.
El Ejercito tampoco comento la resistencia de Contreras, quien sostiene que no acatara el fallo hasta cumplir una instancia de apelacion ante la Corte Suprema, tramite inexistente segun preciso el propio tribunal maximo de la justicia chilena.
Dos dias antes de la sentencia, cuando ya se vislumbraba la rebeldia del ex jefe de la DINA, Pinochet envio al general Eugenio Videla como su emisario personal al fundo (hacienda) el "Viejo Roble" de Contreras.
En esa propiedad agricola, situada unos 1.000 kilometros al sur de Santiago, el ex jefe represivo se mantiene en un virtual atrincheramiento, en medio de rumores de que tendria proteccion armada de unos 80 ex agentes de la DINA.
Se mantiene asi una cierta expectativa en torno a lo que ocurrira cuando el juez instructor Adolfo Banados envie efectivos policiales al "Viejo Roble" a arrestar a Contreras para trasladarlo a Santiago, donde debe notificarle la sentencia.
El diputado socialista Carlos Montes califico de "manotazos desesperados" los anuncios de Contreras sobre un nuevo tramite judicial sin destino, ya que el fallo del martes ultimo es definitivo e inapelable.
Analistas politicos no descartan que el ex jefe de la represion dictatorial busque no solo un golpe de efecto, sino tambien el crear algunos estimulos para recoger respaldos publicos de militares retirados y politicos de extrema derecha.
Por ahora no se percibe ni un pronunciamiento institucional del Ejercito ni el riesgo de asonadas de mandos medios, al estilo de las ebeliones de "carapintadas" ocurridas en Argentina bajo el gobierno de Raul Alfonsin.
Ello porque Pinochet mantiene una rigida estructura jerarquizada y cualquier accion de uniformados en activo de respaldo a Contreras seria de hecho un desafio a la autoridad del propio ex dictador.
En contraste con el silencio del mando militar, dos senadores que a la vez son generales retirados criticaron duramente el fallo condenatorio de la cuarta sala de la Corte Suprema y lo calificaron de un ataque a la institucion armada.
El ex vicecomandante Santiago Sinclair, senador designado que representa al Ejercito, dijo que su arma esta "profundamente herida" y que "aun en Chile no se puede firmar la paz", desechando los llamados del presidente Eduardo Frei a la reconciliacion nacional.
El general retirado Bruno Siebert, senador por el derechista partido Renovacion Nacional, respaldo a Contreras contra la opinion de su colectividad y no descarto que el fallo provoque algun "reventon militar".
La abogada Fabiola Letelier, hermana del asesinado ex canciller y parte querellante en el proceso, considero que esas declaraciones buscan crear un ambiente propicio para una ley de "punto final" de juicios por violaciones de derechos humanos.
En los tribunales civiles y militares hay unas 600 demandas por crimenes de lesa humanidad bajo la dictadura de Pinochet y las cortes castrenses han ordenado el cierre de unas 150 invocando la ley de amnistia expedida en marzo de 1978.
Ahora se trataria de presionar por una nueva amnistia, o "tratado de paz", como lo denomino el senador derechista Sebastian Pinera, para cerrar juicios relativos a crimenes represivos posteriores a la ley de 1978.
El gobierno de Frei y los partidos de la oficialista Concertacion por la Democracia refutaron a Contreras, Sinclair y Siebert y reiteraron que la sentencia del caso Letelier afecta a personas y no a la institucion militar.
El senador Ricardo Hormazabal, del gobernante Partido Democrata Cristiano, recalco que el fallo del caso Letelier consigno que no hay ningun antecedente para suponer que el gobierno militar o Pinochet ordenaron asesinar al ex canciller.
Fabiola Letelier manifesto su acuerdo en que el Ejercito no puede ser involucrado como institucion, pero preciso que mas alla del aspecto judicial existe una responsabilidad politica sobre las actuaciones de la DINA.
Esa responsabilidad, dijo, corresponderia a la Junta Militar de Gobierno y a Pinochet, quien era presidente de esa instancia en su ondicion de comandante del Ejercito y, como tal, el inmediato superior jerarquico de Contreras.
Fue el regimen militar, recordo la abogada, el que doto de cuantiosos recursos a la DINA, que pudo realizar numerosas operaciones en el exterior y conto con 2.000 agentes entre militares y policias y una red de 50.000 informantes. (FIN/IPS/ggr/dg/hd-ip/95
