ECUADOR-PERU: Sombras militares eclipsan formulas diplomaticas

Los mandos militares peruanos habrian desencadenado el ataque que este miercoles rompio el alto el fuego entre Ecuador y Peru para cerrar el paso a una solucion que preparaba el gobierno del presidente Alberto Fujimori, basada en concesiones territoriales reciprocas, dijeron hoy analistas.

La formula fue sugerida el domingo pasado por el vicecanciller Eduardo Ponce, quien representa a Peru en las negociaciones que se celebran en Rio de Janeiro, con la participacion de Ecuador y los paises garantes del tratado de 1942: Argentina, Brasil, Chile y Estados Unidos.

Esta flexibilidad, que podria conducir a una solucion definitiva que compatibilice las aspiraciones de Ecuador, de tener una salida por el rio Cenepa hasta el Amazonas, y los derechos de Peru de preservar la integridad de su territorio, respondio a un cambio importante en la posicion ecuatoriana.

El presidente de Ecuador, Sixto Duran-Ballen, abandono la linea diplomatica de su pais 35 anos despues que el gobierno de su pais desconocio en 1960 el Protocolo de Rio de Janeiro, al reconocer su vigencia y limitar sus reivindicaciones a la zona no delimitada de la frontera.

Segun la historiadora Ines Veraud, "Duran hizo un valiente y pragmatico cambio de linea diplomatica, que da a Ecuador un objetivo relativamente alcanzable".

"Fujimori, quien realizo evidentes esfuerzos para resolver las secuelas de diferendos fronterizos con Ecuador y Chile, reacciono ofreciendo la posibilidad de una formula de negociacion basada en concesiones territoriales", anadio.

Pero las sugerencias e iniciativas de Fujimori y Duran Ballen tienen que superar obstaculos politicos internos en sus propios paises.

"En cierta medida, Fujimori y Duran-Ballen son prisioneros de la voluntad guerrerista de sus mandos militares y del acecho de sus opositores politicos, que aguardan la oportunidad para aprovechar cualquier contraste diplomatico o militar", opino el sociologo Alberto Panessi.

Panessi considera, como varios expertos civiles, que existio presion de los mandos militares peruanos para modificar el curso de las conversaciones diplomaticas iniciadas en Rio de Janiero en la noche del martes.

Segun esta tesis, la propuesta iba a plantearse en Rio de Janeiro en el mismo escenario en donde en 1942 se firmo el Protocolo de Rio de janeiro, como una formula conducente a convencer a Ecuador y a los paises garantes del Tratado de concluir la demarcacion de la linea fronteriza.

Pero la cupula castrense peruana, estimulada por la oposicion politica a Fujimori, cerro el paso a la formulacion de la propuesta, infringiendo el alto el fuego tacito, convenido pero no concertado, que duro menos de 48 horas.

Segun Carlos Reyna, experto de una organizacion no gubernamental (ONG) que se ocupa de temas militares, los mandos castrenses no aceptaron interrumpir las operaciones de desalojo de las tropas ecuatorianas instaladas en el territorio en disputa.

La interrupcion de la tregua no declarada coloco nuevamente al conflicto fronterizo entre Peru y Ecuador en una senda peligrosa, que podria encaminarlo hacia una guerra de mayor magnitud.

Segun los analistas, si se produce un fracaso diplomatico en Rio, los mandos militares, hasta ahora forzados por sus gobernantes civiles a mantener focalizada la contienda, consideraran necesario atacar las fuentes logisticas enemigas.

Los presidentes de Ecuador y Peru han endurecido nuevamente sus lenguajes, sus tropas han reanudado los combates y las conversaciones diplomaticas en Rio de Janeiro parecen encaminarse a un inevitable fracaso.

Los analistas consultados coinciden en que los garantes del Protocolo de Rio de Janeiro no le daran a Peru lo que reclama: participacion en la colocacion de los hitos demarcatorios establecidos por el tratado que ellos se comprometieron a garantizar.

"Luego de algunas exhortaciones a la paz, los garantes tal vez traten de derivar el conflicto hacia la participacion de la OEA (Organizacion de Estados Americanos) o la ONU (Organizacion de las Naciones Unidas)", dijo Panessi.

"Y frente a esa contingencia, los militares peruanos prefieren fijar ellos la lineea de frontera, porque probablemente alli quedara definitivamente", concluyo el experto. (FIN/IPS/al/ag/rp/95

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