Las esperanzas de poner fin a la guerra civil en la republica de Sierra Leona parecieron desvanecerse tras los embates rebeldes del ultimo fin de semana, segun informes de prensa divulgados en esta capital.
La guerra estallo en marzo de 1991, cuando el Frente Unido Revolucionario (FUR) invadio Sierra Leona desde la vecina Liberia, y desde entonces ha cobrado miles de vidas en este pais de Africa occidental volcado sobre el Atlantico.
El jefe del estado, capitan Valentine Strasser, libero la semana pasada a 219 rebeldes detenidos en la prision de maxima seguridad de Freetown, en el entendido de que los jefes guerrilleros acogerian favorablemente la oferta de amnistia.
Por el contrario, el FUR respondio con una serie de ataques a ciudades y villas en las provincias del norte y el este del pais, que limitan con Guinea.
Los rebeldes lanzaron un sorpresivo golpe contra la ciudad de Kenema, capital de la region oriental, causando fuertes perdidas materiales y un numero no conocido de muertos entre la poblacion civil.
Kenema es una ciudad minera, con cerca de 20.000 habitantes, que se encuentra a unos 300 kilometros de Freetown y la costa atlantica. Ubicada en medio de una zona rica en diamantes, la ciudad ha soportado el asedio rebelde durante el ultimo ano.
El territorio de Sierra Leona fue una colonia britanica hasta 1961, cuando alcanzo la independencia. Con una gran riqueza en oro y diamantes, este pais de unos cinco millones de habitantes ha vivido una tormentosa evolucion politica.
Despues de 13 anos de un regimen constitucional de partido unico, y de haber nacionalizado la comercializacion del oro y los diamantes, el pueblo aprobo en l991 una constitucion pluralista.
No se han divulgado cifras oficiales sobre la reciente embestida rebelde, pues las oficinas del Consejo Nacional de Gobierno Provisional (CNGP) han mantenido silencio sobre el desarrollo de la guerra.
De hecho, el CNGP ha ordenado un bloqueo informativo sobre la guerra, "hasta que la tengamos bajo control", segun dijo un portavoz gubernamental.
La primera ronda de conversaciones de paz entre el gobierno y el FUR habia concluido a primeros de diciembre, y los rebeldes habian prometido un cese del fuego a cambio de la amnistia.
Todo eso parece ahora pura ficcion. El secretario de estado de Salud y Servicios Sociales, teniente coronel Akim Gibril, dijo la semana pasada que el gesto de la amnistia iba dirigido "a mejorar la imagen del gobierno en el campo de los derechos humanos y a promover el espiritu de reconciliacion nacional".
Muchos ciudadanos de este pais son escepticos sobre las perspectivas de negociacion con el FUR, pues perciben falta de coordinacion dentro del bando rebelde.
"Creo que el gobierno deberia reforzar su ofensiva y aniquilar a los rebeldes. No me parece que estos tengan ninguna estructura de mando en la que se pueda creer. Lo que estamos viendo es puro y simple bandidaje", expreso con indignacion Samuel Jones, historiador del Colegio Fourah Bay.
Al comenzar la guerra, el FUR recibia el apoyo del Frente Patriotico Nacional de Liberia, liderado por Charles Taylor, que asi podia castigar al gobierno de Sierra Leona por servir de base de retaguardia a la Fuerza de Intervencion de Africa Occidental (ECOMOG).
Ahora se cree, en cambio, que las rutas de aprovisionamiento del FUR se han agotado, al capturar el gobierno los puntos de entrada al territorio. El jefe rebelde Foday Sankoh, un antiguo cabo del ejercito nacional, declaro que su lucha va dirigida a restaurar la democracia en Sierra Leona.
Entretanto, un funcionario del CNGP dijo a IPS que el gobierno incrementaria su ofensiva, persiguiendo al mismo tiempo la opcion de paz. (FIN/IPS/tra-en/lf/mn/gk/arl/ag/np/94