Mas de mil 500 empleados del sector Salud y de Correos, mantenian hoy por segundo dia consecutivo una huelga en demanda de incrementos salariales, equipo medico y otras prevendas, que segun el gobierno, seran negociadas una vez que abandonen el movimiento de presion.
Los trabajadores de salud exigen un incremento salarial del 30 por ciento, mientras que los de correos piden uno del 40 por ciento.
En ambos casos los trabajadores argumentan que sus salarios, por el equivalente a 200 y 120 dolares mensuales respectivamente, son insuficientes para cubrir sus necesidades basicas.
Los paros laborales fueron criticados fuertemente por el gobierno, que dio a los huelguistas un plazo de 24 horas para abandonar su postura, antes de ordenar la intervencion del ejercito para restablecer los servicios.
Unos 600 empleados del sector Salud en Tegucigalpa, la capital del pais, iniciaron la huelga en demanda un incremento del 30 por ciento y el pago de unos nueve mil dolares, que por concepto de horas extras se les adeuda desde los ultimos siete meses.
Igualmente exigen la dotacion de uniformes y equipo medico para atender las demandas sanitarias que atienden las principales instituciones estatales de la Salud, informo Efrain Figueroa, uno de los huelguistas.
Figueroa denuncio que por la falta de equipamiento en las instituciones de salud resulta imposible garantizar mejores servicios, "porque la mayoria de los hospitales carece de las herramientas basicas para trabajar".
Las autoridades de Salud indicaron que desde hace tres meses sostienen platicas con empleados y medicos sobre el incremento de salarios y la dotacion de equipo, por lo que consideran que no se justifica el paro iniciado.
Enrique Zelaya, de la Division de Riesgo Poblacional del Ministerio de Salud, dijo que la huelga de los empleados, ademas de injusta, "es muy peligrosa, porque vivimos en la capital una epidemia de colera, cuyo control podria perderse a causa de esta irresponsabilidad de los empleados".
Segun Zelaya, la capital hondurena paso desde la semana pasada a un estado de "alerta maxima" ante el fuerte rebrote de colera que en menos de un mes ha afectado a mas de 160 personas, sin que aun se reporten victimas mortales.
"Hacemos todos los esfuerzos por controlar la enfermedad, pero esta huelga entorpece todo porque los empleados han cerrado los portones de acceso a los centros de salud y asi no podemos trabajar", denuncio.
"Si a causa de esta huelga se produce un muerto por colera, tengan la seguridad que el Ministerio de Salud demandara a los empleados, porque ellos seran los unicos culpables ante la intransigencia que mantienen", advirtio Zelaya.
A la huelga de los trabajadores de la Salud, se suma otro movimiento similar de los empleados del Correo a nivel nacional, quienes demandan un incremento salarial, en vista de que su salario, de 1.100 lempiras mensuales, unos 120 dolares, resulta insuficiente para cubrir sus necesidades.
Aqui, segun el gobierno, el paro de los empleados es completamente "absurdo", porque se esta a las puertas de suscribir un nuevo contrato colectivo de trabajo, para lo cual se efectuan negociaciones.
Guadalupe Jerezano, una de los tres vicepresidentes que tiene el pais, dijo que el gobierno "por ningun punto permitira que se paralicen las labores del correo. Si los huelguistas no deponen sus posiciones, nos veremos obligados a usar medidas mas severas para reanudar el servicio".
Segun Jerezano, "este gobierno es el que mas voluntad de dialogo y mejoras salariales ha dado a los diversos sectores, pero a veces estos abusan de la democracia y gestan movimientos por cualquier cosa, sin tener base en sus demandas".
Indico que en el caso de ambas huelgas, la de salud y correos, el gobierno ha dado un plazo de 24 horas para que se resuelvan, antes de verse obligados a recurrir a los militares para garantizar el acceso a estos servicios de los casi cinco millones de hondurenos.
Los movimientos huelguisticos en Honduras cobraron auge en las ultimas dos semanas, cuando el gobierno anuncio la drastica aplicacion de medidas de ajuste economico que implican minidevaluaciones monetarias, aumento de impuestos y de los servicios de salud, telefonos, agua y energia, entre otros.
Las medidas, que entraron en vigencia el 1 de este mes, han provocado aumentos en los precios de articulos de consumo basico, por lo que los economistas temen un severo repunte inflacionario.
El gobierno se habia planetado la meta de acumualr en 1994 una inflacion del 20 por ciento, pero esa cantidad se resgistro ya en los primeros nueves meses del ano.
De acuerdo con economistas independientes, todo apunta a que el indice inflacionario acumule en el ano una tasa del 30 por ciento, si se toma en cuenta el ritmo promedio mensual que ha registrado hasta octubre, de 2,8 por ciento. (Fin/IPS/tm/mc/tl/94). —