En Ecuador las leyes antidrogas y la represion policial, lejos de combatir a poderosos narcotraficantes afecto a consumidores y a pequenos vendedores y correos, quienes antes que delincuentes aparecen como victimas.
Entre 1982 y 1993 el numero de presos por drogas en este pais andino paso de 18 a mas de 35 por ciento del total de detenidos, estimado actualmente en alrededor de 9.000. La mayoria son consumidores, arrestados cuando portaban de uno a cinco gramos de cocaina o marihuana.
Les siguen en numero los pequenos traficantes y los correos o "mulas", personas de escasos recursos economicos que generalmente son contratadas para transportar piscofarmacos en zonas de frontera o aeropuertos.
El discurso oficial que senala al narcotrafico como un mal que se combate con firmeza y a todos los niveles choca con la realidad. La mayoria de los "lavadores" de dinero ilicito y los grandes traficantes de drogas son los menos afectados por la represion.
Desde que en 1990 se dicto la primera ley antidrogas en el pais, que buscaba "modernizar" el combate contra el narcotrafico y el lavado de dinero, los detenidos por consumo y trafico limitado van en progresivo aumento, mientras apenas se ha encarcelado a media docena de lavadores y grandes traficantes.
A diferencia de los poderosos narcotraficantes que obtienen miles de dolares diarios por su negocio, un pequeno traficante logra mensualmente unos 100 dolares por vender marihuana, base o clorhidrato de cocaina.
Antes que encontrar una rehabilitacion en las sobrepobladas carceles del pais, donde 70 por ciento de los detenidos estan sin sentencia, los acusados por narcotrafico o consumo pasan a sufrir los problemas de hacinamiento, falta de alimentacion, trabajo y ayuda medica.
Su dificil situacion, al igual que la de los detenidos por otras acusaciones, provoca resentimientos y va gestando potenciales delincuentes peligrosos, advierte la Confraternidad Carcelaria, un grupo no gubernamental que aboga por lograr una verdadera rehabilitacion de los presos.
Pese a las visibles consecuencias de la aplicacion de las actuales normas, el incremento del numero de detenidos es presentado por la policia y el gobierno como una demostracion exitosa de su lucha contra el narcotrafico.
La ley antidrogas, dictada cuando el gobierno de Estados Unidos presionaba a los paises andinos para que endurecieran la lucha contra el narcotrafico poniendo el acento en la represion, es para varios juristas locales una norma injusta que debe ser urgentemente reformada.
Segun la ley, a diferencia de otros delitos, en casos de tenencia de drogas desaparece la presuncion de inocencia del detenido y basta un informe policial para que el acusado sea encarcelado.
Debido a ese hecho, se reportan periodicamente en la justicia penal procesos en los que el detenido, que puede enfrentar hasta 16 anos de carcel, es encontrado inocente por el juez o es sentenciado solo a tres meses de sancion, luego de haber permanecido dos o mas anos en la carcel.
Medicos y sociologos recomiendan cambiar la actual normativa. La accion del estado, debe apuntar a la prevencion, a la rehabilitacion de los consumidores y a la mejora de las condiciones de vida de la poblacion pobre, , antes que a la represion, senalan los criticos.
Las mas afectadas por delitos de drogas son las mujeres pobres, quienes muchas veces, para aliviar su situacion, aceptan, sin medir las consecuencias, los ofrecimientos de narcotraficantes para trabajar de correos o "mulas".
Estadisticas oficiales indican que 70 por ciento de quienes estan presas son acusadas de delitos de narcotrafico.
El drama en los centros de detencion de mujeres es mayor al de los hombres, pues alli viven los hijos de las reclusas, quienes desde pequenos comienzan, sin saberlo, a pagar los errores de sus madres.
Se calcula que la policia realiza unas 16 redadas mensuales antinarcoticos, generalmente en zonas marginales, donde se detiene a alrededor de cinco personas entre traficantes y consumidores.
Estudios independientes senalan que quienes incurren en delitos de trafico limitado perciben su actividad como una forma facil de hacer dinero. La estructura de venta de esos pequenos traficantes, muy distinta a la de los "capos" del negocio, es mas facil de detectar y neutralizar por parte de la policia.
El numero de esta clase de narcotraficantes, llamado en Ecuador "brujo" o "pusher", va en progesivo aumento en los ultimos anos, indica una investigacion que realizo el antropologo Xavier Andrade para la Fundacion Nuestros Jovenes, entidad que trabaja en la prevencion y analisis del tema drogas.
El crecimiento de la actividad se explicaria por el progresivo aumento de la pobreza y por las falencias del sistema educativo. Varios estudios coinciden en senalar que mas de 60 por ciento de los 11 millones de ecuatorianos viven actualmente bajo la linea de pobreza.
Ecuador, considerado zona de transito de drogas y de lavado de dinero, recibe anualmente de Estados Unidos alrededor de tres millones de dolares para su lucha contra el narcotrafico, en su mayoria para acciones de represion.
Una investigacion de la Fundacion Nuestros Jovenes indica que, pese a las alertas de la policia y a las campanas publicitarias que "satanizan" el uso de drogas, en Ecuador el nivel de consumo es minimo.
El estudio senala que el nivel de "prevalecencia vital", es decir quienes han usado alguna vez en su vida drogas, es de cinco por ciento para la marihuana, 1,2 por ciento para el sulfato o base de cocaina y 1,1 por ciento para el clorhidrato de cocaina.
Esos porcentajes son bajos si se considera que 14 por ciento de la poblacion ecuatoriana esta afectada por el abuso de los psicofarmacos medicos, y que 80 por ciento de los jovenes consume alcohol desde los 12 anos. (FIN/IPS/dc/dg/dn/94)