Venezuela obtuvo entre 1973 y 1995 ingresos por 265.000 millones de dólares, "cifra que equivale a 18 planes Marshall", pero el resultado de su administración "desembocó en la catástrofe", dijo hoy, al ser homenajeado por el parlamento, el escritor Arturo Uslar Pietri.
Narrador, ensayista, político y periodista, Uslar cumplió este jueves 90 años, por lo que el parlamento de Venezuela celebró una sesión exclusiva para escucharle y el presidente Rafael Caldera ofreció un banquete en su honor.
Lúcido, vehemente, con el tono didáctico de charlas televisivas que le hicieron famoso, Uslar improvisó ante el Congreso una disertación de 30 minutos sobre la historia de Venezuela y los desafíos más urgentes del presente.
La Venezuela arrasada la pasada centuria por la guerra de independecia y guerras civiles vio manar en el siglo XX una riqueza del subsuelo que pertenecía al Estado y fue oportunidad desperdiciada para desarrollar una Nación, dijo.
Recordó que hace 60 años lanzó la consigna de "sembrar el petróleo", es decir, traducirlo en riqueza agrícola e industrial, pero, según dijo, desde que socialdemócratas y militares dieron un golpe de Estado en 1945 fue el Estado dadivoso el que creció.
Esa tendencia se acentuó luego que a la guerra del Medio Oriente en 1973 siguió una multiplicación de los precios del petróleo, expuso.
"Entre 1973 y 1995 el petróleo produjo a Venezuela ingresos por 265.000 millones de dólares, una cifra de magnitudes y significado que se nos escapan", aseveró.
"Para comprenderla, baste decir que el estadounidense Plan Marshall para la reconstrucción de Europa arrasada por la Segunda Guerra Mundial partió de una base de 14.000 millones de dólares en cinco años", dijo Uslar, arrancando aplausos.
Los venezolanos "en el breve lapso de algo más de 20 años recibimos 18 veces el Plan Marshall, pero la administración de esa riqueza por un Estado enorme y monstruoso nos ha conducido a esta catástrofe", destacó.
"Sin saber cómo, mientras recibíamos esos recursos, adquirimos una deuda externa de 30.000 millones de dólares, que hoy pesa sobre todos en la forma de una inflación como no habíamos conocido", agregó.
Postuló que al cabo de muchos intentos por construir una nación, los dirigentes venezolanos encaran el desafío de "enmendar esos errores, con sacrificios, más allá de pequeñeces ideológicas y de intereses mezquinos de grupos y partidos".
Defensor durante toda su vida de los valores de Occidente, del libre mercado y de la reducción del Estado, Uslar fue una de las eminencias de los regímenes de transición (1936-1945) que siguieron a la larga dictadura de Juan Vicente Gómez (1908-1935).
Pasada esa opción de poder, una nueva se presentó en 1963, cuando fue candidato presidencial independiente y logró una buena votación, aunque le superaron los partidos tradicionales. Luego de 10 años como parlamentario, en 1973 abandonó la política activa.
De su obra literaria destaca su primera novela, "Las lanzas coloradas" (1931), la mejor según la crítica y en la cual Uslar pinta el año más sagriento de la guerra de independencia, 1814, cuando según Simón Bolívar murieron 80.000 personas en un país que no llegaba a 800.000 habitantes.
Este jueves, con voz quebrada por la emoción, Uslar evocó ese período de la historia: "Ninguna guerra de independencia en América fue tan larga, tan violenta, ni costó tanta sangre. A ningún país como al nuestro le costó tanto su libertad".
Ahora, al fin del siglo XX "estamos en otro momento providencial, histórico, el de hacer una transformación inmensa para superar este cuadro de miseria, atraso y frustración", concluyó Uslar. (FIN/IPS/hm/dg/ip-cr/96)