RÍO DE JANEIRO – La humanidad ganó dos nuevos mártires. Bruno Araújo Pereira y Dom Phillips murieron por defender la Amazonia y los indígenas, sostenes de la vida humana en el planeta.
RÍO DE JANEIRO – “Ya no podemos beber el agua de los ríos, de los arroyos, porque está envenenada desde sus nacientes”, lamentó Megaron Txucarramãe, uno de los más conocidos líderes indígenas de Brasil.
Indígenas del pueblo amazónico mundurukú hicieron oír en la capital de Brasil su reclamo de demarcación de tierras y derecho a consulta previa para frenar el complejo hidroeléctrico del Tapajós, que podría inundar varias de sus aldeas.