GINEBRA – En el mundo se fuma menos, pero la epidemia del tabaco está lejos de terminar porque todavía afecta a una de cada cinco adultos en el mundo, indicó un reporte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) divulgado este lunes 6.
El número de consumidores de tabaco disminuyó de 1380 millones en el año 2000 a 1200 millones en 2024. Y desde 2010 el número de personas que consumen tabaco se ha reducido en 120 millones, una disminución de 27 % en términos relativos.
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, dijo que “millones de personas están dejando de fumar o no comienzan a consumir tabaco gracias a las iniciativas de control del tabaco de países de todo el mundo”.
Sin embargo, “en respuesta a este sólido progreso, la industria tabacalera está contraatacando con nuevos productos de nicotina, dirigidos enérgicamente a los jóvenes”, lamentó Tedros al presentar el reporte en esta ciudad suiza.
Por primera vez, la OMS ha estimado el uso mundial de cigarrillos electrónicos, y las cifras son alarmantes: vapean más de 100 millones de personas en todo el mundo.
“Los cigarrillos electrónicos están impulsando una nueva ola de adicción a la nicotina. Se promocionan como una estrategia de reducción de daños, pero en realidad están enganchando a los jóvenes a la nicotina a una edad más temprana y corren el riesgo de socavar décadas de progreso”: Etienne Krug.
Los adultos que consumen esos nuevos productos son 86 millones en el mundo, en su mayoría de países con altos ingresos, y al menos 15 millones de niños de 13 a 15 años ya usan cigarrillos electrónicos.
En los países con datos disponibles, los niños tienen, en promedio, nueve veces más probabilidades de vapear que los adultos, por lo que la OMS alerta sobre los riesgos para la salud de las nuevas generaciones, jóvenes y adolescentes
La industria tabacalera está introduciendo una cadena incesante de nuevos productos y tecnologías en su afán de comercializar la adicción al tabaco no sólo con cigarrillos sino también con cigarrillos electrónicos, bolsas de nicotina y productos de tabaco calentados, entre otros.
Etienne Krug, director del Departamento de Determinantes de la Salud, Promoción y Prevención de la OMS, alertó de que “los cigarrillos electrónicos están impulsando una nueva ola de adicción a la nicotina”.
“Se promocionan como una estrategia de reducción de daños, pero en realidad están enganchando a los jóvenes a la nicotina a una edad más temprana y corren el riesgo de socavar décadas de progreso”, expuso Krug.
Si bien entre 2000 y 2024 se ha observado una disminución constante del consumo de tabaco, tanto en hombres como en mujeres, y en todos los grupos de edad, las mujeres han liderado el esfuerzo por dejar de fumar.
Lograron cinco años antes, en 2020, el objetivo mundial de reducción para 2025, alcanzando el hito de 30 %. La prevalencia del consumo de tabaco entre las mujeres se redujo de 11 % en 2010 a tan solo 6,6 % en 2024, y el número de mujeres consumidoras se redujo de 277 millones en 2010 a 206 millones en 2024.
En cambio, no se prevé que los hombres alcancen la meta hasta 2031. Hoy en día, más de cuatro de cada cinco consumidores de tabaco en todo el mundo son hombres, y poco menos de 1000 millones de hombres siguen consumiendo tabaco.
Si bien la prevalencia entre los hombres ha disminuido, de 41,4 % en 2010 a 32,5 % en 2024, el ritmo del cambio es demasiado lento.
En el panorama por regiones, América ha logrado una reducción relativa de 36 %, con una prevalencia que descendió a 14 % en 2024, aunque algunos países aún carecen de datos suficientes.
Europa es actualmente la región con mayor prevalencia a nivel mundial, con 24,1 % de adultos consumidores de tabaco en 2024, y las mujeres en ese continente tienen la prevalencia mundial más alta, 17,4 %.
En el Mediterráneo oriental la prevalencia es de 18 % y el consumo de tabaco sigue aumentando en algunos países.
En el Pacífico occidental, que corresponde a Asia oriental y Oceanía, el progreso es el más lento, con 22,9 % de adultos que consumían tabaco en 2024, aunque inferior a la de 25,8 % de 2010. La prevalencia en las mujeres es baja (2,5 %), pero en los hombres es la más alta de todas las regiones (43,3 %).
En Asia sudoriental, antaño foco mundial de la enfermedad, la prevalencia entre los hombres casi se redujo a la mitad, de 70 % en 2000 al 37 % en 2024. La región por sí sola representa más de la mitad del descenso mundial.
Y en África la prevalencia es la más baja de todas las regiones, con 9,5 % en 2024, y la región está en vías de alcanzar la meta de 30 %. Sin embargo, debido al crecimiento demográfico, el número absoluto de consumidores sigue aumentando.
Tedros dijo que los gobiernos “deben actuar con mayor rapidez y firmeza en la implementación de políticas de control del tabaco de eficacia comprobada”.
La OMS procura que los gobiernos implementen y hagan cumplir plenamente el paquete Mpower, acrónimo en inglés de las seis medidas recomendadas para reducir la demanda de tabaco.
Ellas son monitorear el consumo de tabaco y las políticas de prevención; proteger a las personas del humo del tabaco; ofrecer ayuda para dejar de consumir tabaco; advertir sobre los peligros del producto; aumentar los impuestos al tabaco, y hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio.
También se pide eliminar las lagunas legales que permiten a las industrias del tabaco y la nicotina dirigirse a los niños, y regular los nuevos productos con nicotina, como los cigarrillos electrónicos.
A-E/HM