Los mosquitos del género Aedes son grandes transmisores del virus que causa la chikunguña, una enfermedad que ha matado a más de 100 personas en América del Sur este año. Avanza por la región junto con el virus del Oropouche, transmitido por jejenes, y la Organización Panamericana de la Salud recomienda sostener las campañas de prevención centradas en la eliminación de sus criaderos en aguas estancadas. Imagen: CDC