Hortensia, Sonia, Cristina y Elizabeth, cuatro algueras del municipio chileno de Pichilemu, delante del edificio municipal antes de ingresar a una reunión con el alcalde interino, Sergio Mella. Las trabajadoras pretenden la concesión y un local municipal para exponer y vender sus artesanías, jabones y diversos productos confeccionados con algas. La venta les permite subsistir durante el invierno austral, cuando hay veda para extraer algas. Imagen: Orlando Milesi / IPS