NAIROBI – El camino hacia la COP29 ha comenzado en serio en el contexto de un informe climático global que indica que 2023 no solo fue el año más cálido de un registro climático de 174 años, sino que lo fue por mucho. Las temperaturas récord, combinadas con El Niño, empujaron a las naciones vulnerables y pobres del Sur global a la primera línea de fenómenos climáticos extremos y severos.
El año pasado, hubo “una carnicería climática” en África, un continente que representa un paradigma de los impactos del recalentamiento planetario. Se sucedieron inundaciones fatales en la República Democrática del Congo y Kenia, tormentas e inundaciones en Libia que arrasaron una cuarta parte de una ciudad, así como ciclones mortales en países como Malaui.
A esos fenómenos se unió una grave sequía en Kenia y una ola de calor durante el invierno austral que duró meses en los países del sur de África.
En este contexto, el secretario ejecutivo de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (Cmnucc), Simon Stiell, pronunció un importante discurso el 2 de febrero desde Bakú, la capital de Azerbaiyán que será la anfitriona de la 29 Conferencia de las Partes (COP29) sobre el clima, en noviembre de este año.
El discurso del político y diplomático oriundo de Granada, un pequeño país insular del Caribe, puso sobre la mesa los asuntos clave y las acciones necesarias en los períodos cruciales que se avecinan, aprovechando los avances logrados en la COP28, que concluyó en Dubái en diciembre.
“Ya pasó el tiempo de seguir haciendo lo mismo de siempre en todos los aspectos de la lucha climática mundial. Así que hoy adoptaré un enfoque diferente para esta conferencia. Quiero que comencemos en 2050, imaginando cómo sería el mundo si lográramos limitar el calentamiento global a 1,5°C y proteger a todas las personas de los impactos del cambio climático”, señaló.
“Por supuesto, no será una utopía y existe una posible extinción a la que enfrentarse, pero volveré sobre eso. En esta visión de éxito, los sistemas energéticos globales tienen emisiones netas cero. Los países (o al menos las regiones) serán en gran medida autosuficientes desde el punto de vista energético”, aseguró Stiell, quien fue ministro de varias carteras de Granada desde 2013 a 2022, la última la de Resilliencia Climática y Medio Ambiente durante cinco años.
Su discurso abordó todas las cuestiones clave que se encuentran en el centro del camino global hacia la descarbonización del mundo para 2050, en consonancia con el Acuerdo de París, adoptado en 2015 durante la COP21 de la Cmnucc.
Allí, consideró el secretario ejecutivo de la Cmnucc desde 2022, los líderes mundiales llegaron a un acuerdo histórico que ofrece un marco sólido para el logro de objetivos climáticos cruciales y la preservación del medio ambiente, las personas y toda la vida en la Tierra.
“De hecho, los países están logrando avances notables para alcanzar objetivos establecidos, como reducir significativamente las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Sin embargo, las promesas y compromisos de los gobiernos no son lo suficientemente ambiciosos y no nos llevarán a emisiones netas cero, es decir, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero lo más cerca posible de cero para 2050″, dijo a IPS Amos Kaggwa, un activista climático radicado en Uganda, al reflejar el sentir de sus pares en el Sur global.
Sobre la energía renovable, Stiell aseguró: “Las energías renovables han hecho que la energía sea accesible, asequible y predecible para todos. Eso significa que evitamos las crisis y desigualdades que han dado forma a las tendencias económicas y los conflictos en el pasado. El sistema financiero global ha priorizado el bienestar humano por sobre el servicio únicamente el final”.
Destacó también que “los billones (millones de millones) que antes se gastaban en subsidios a los combustibles fósiles están disponibles para mejores propósitos: atención médica, educación y redes de seguridad para quienes se quedan atrás».
«Nuestras sociedades resilientes han pasado de una relación extractiva con la naturaleza a una regenerativa. Ya no es médicamente peligroso salir a la calle en las principales ciudades debido a la contaminación del aire. Como consecuencia de ello, cada año se salvan millones de vidas”, añadió.
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Limitar el calentamiento global a 1,5°C requerirá una disminución del 43 % en las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030, según estimaciones del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático. La quema de combustibles fósiles para electricidad, transporte y calefacción representa la gran mayoría de las emisiones nocivas, aproximadamente el 73,2 %.
En este contexto, los líderes descarbonizadores son aquellos con mayores inversiones en energía renovable para abandonar los combustibles fósiles.
Incluyen a China con una inversión global de 758 000 millones de dólares en capacidad de energía renovable de 2010 a 2019, Estados Unidos con 356 000 millones, Japón con 202 000 millones, Alemania con 179 000 millones y Reino Unido con 122 mil millones.
“Estados Unidos, China, Rusia, Brasil, Indonesia, Alemania, India, Reino Unido, Japón, Canadá, Francia, Australia, Argentina, México, Sudáfrica, Italia, Corea del Sur, Arabia Saudita, la Unión Europea y Turquía como el Grupo de los 20 (G20, responsable conjunto de 80 % de las emisiones mundiales en 2025) ha rediseñado seriamente sus objetivos sobre esta base”, dijo Stiell.
Eso ha sucedido, precisó, “porque saben que los cambios en relaciones públicas y marcas o las alteraciones en los márgenes no serán suficientes para cumplir con sus responsabilidades climáticas, y que también los dejaría muy atrás en la curva de innovación, no en la vanguardia».
«Estos planes climáticos nacionales no son sólo pedazos de papel; deben estar respaldados por instrumentos políticos sólidos, calculados en costos y traducibles en oportunidades de inversión listas para usar”, añadió.
Stiell dijo que es hora de continuar con la tarea de salvar el planeta, las personas y toda la vida en la Tierra, e insta a los ciudadanos de todo el mundo a exigir una acción climática más audaz ahora.
Prometió, asimismo, que en la próxima COP y en las que sigan no habrá descanso para impulsar las mayores ambiciones climáticas de acuerdo con la ciencia, trabajando codo a codo con todos los gobiernos, empresas y líderes comunitarios.
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