El empleado de una bodega estatal en La Habana pesa un grupo de alimentos racionados. Cuba mantiene desde marzo de 1962 un sistema de distribución normada mediante una cartilla que provee mensualmente a cada ciudadano ciertas cantidades de arroz, azúcar, granos, huevos, café, aceite, pan, productos cárnicos y aseo, entre otros. Imagen: Jorge Luis Baños / IPS