Estudiantes en su adolescencia caminan por una calle de La Habana. De acuerdo con la estudiante de psicología, Yendra Jorge, niñas, niños y adolescentes cubanos pueden encontrar situaciones violentas en ámbitos como las familias, comunidades o escuelas. Allí muchas veces no son escuchados, porque se cree que no tienen nada que decir o que no es importante. Imagen: Jorge Luis Baños / IPS

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