GINEBRA – Un brote de dengue avanza por América Latina, con más de tres millones de casos reportados en lo que va de año, y ha afectado mayormente a Brasil, Bolivia, Perú y Colombia, advirtió la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El dengue se expande por las áreas tropicales y también las subtropicales del planeta y ya es endémico en más de 100 países. América Latina, el Sudeste asiático y el Pacífico occidental son las regiones más afectadas.
En todo el mundo los casos reportados se han multiplicado por ocho desde el año 2000, cuando se registraron unos 500 000, y en 2022 pasaron de 4,2 millones.
Este año podrían batir récords debido principalmente a que el calentamiento global que sufre el planeta favorece al mosquito que transmite la enfermedad.
En América Latina y el Caribe los gobiernos “deben estar extremadamente alertas y preparados” para intensificar acciones dirigidas a controlar la expansión del dengue, ya que se puede prever “un aumento de casos en la segunda mitad de 2023”, ha advertido la OMS.
El número de personas infectadas en la región en el primer semestre, 3 030 280, supera a la de todo 2022 (2,8 millones de casos) y está cerca del récord de 3,1 millones registrados en 2019.
Brasil es el país más afectado, con 2 376 522 casos y 769 decesos, seguido de Perú, con 197 461 personas infectadas y 339 muertes, Bolivia con 133 779 casos y 77 fallecidos, Argentina con 118 089 y 65 decesos, Nicaragua con 63 200 y un fallecido, Colombia con 54 389 y 30, y México con 41 287 casos y 13 muertes.
El número de casos en Brasil representa un aumento de 13 % en comparación con el primer semestre del año pasado y de 73 % en relación con el promedio de los últimos cinco años.
La subregión caribeña está menos afectada según los registros de la OMS, aunque se hizo la observación de que hay retrasos en la notificación de sus casos.
Si se consideran los casos de dengue severo, que puede conducir a la muerte, Brasil ha sufrido 1249 casos, seguido por Colombia con 777 y Perú con 701.
El dengue es una enfermedad tropical causada por un virus transmitido por varias especies de mosquitos hembra del género Aedes, principalmente el Aedes aegypti.
La infección generalmente conlleva fiebre alta, dolor de cabeza, vómitos, dolores musculares y articulares, y picazón y erupción cutánea, aunque muchas personas que contraen el dengue no presentan síntomas.
La forma grave o hemorrágica del dengue lleva a la pérdida del apetito, vómitos, fiebre alta, dolores abdominal y de cabeza, dificultad para respirar y fuga de plasma. Pueden ocurrir conmoción e insuficiencia circulatoria y, si no se trata, causa la muerte hasta en 50 % de los casos.
La OMS evaluó el riesgo de dengue como alto en toda la región latinoamericana, debido a la amplia distribución de los mosquitos transmisores sobre su geografía.
Sin embargo, entre el 12 de junio y el 1 de julio la OMS observó una disminución de casos en las subregiones del Cono Sur y los países andinos, lo que se atribuye a la aplicación de medidas de control y al cambio estacional de la temperatura y del clima.
Contra el dengue se han aprobado dos tipos de vacuna que están disponibles comercialmente. Pero la forma más efectiva de combate a la enfermedad es el control de vectores, lo que incluye reducir el hábitat de los mosquitos –por ejemplo eliminando las aguas estancadas- y medidas de prevención contra sus picaduras.
A-E/HM