Ambientalistas indios recurren a la justicia para impedir la realización de proyectos que consideran perjudiciales para el ambiente como las plantas de energía termal.
Mientras Hamás reprime los derechos de las mujeres palestinas en la Franja de Gaza, sus hermanas en la ocupada Cisjordania están lentamente ganando terreno. Pero la burocracia, que a veces es apoyada por la ayuda extranjera, está limitando esos avances.