Si prospera el experimento de cultivo de sorgo dulce en el sudoriental estado estadounidense de Florida, para producir etanol, se estaría ante un cambio positivo fundamental en el modo en que este país y otros crean y usan la bioenergía, según investigadores.
A los biocombustibles, como el etanol, se les culpa en general por el aumento de los precios de los alimentos.
Por lo menos 25 por ciento del maíz cultivado en Estados Unidos se destina a la elaboración de biocombustibles y grandes áreas de Brasil, China, Indonesia y Malasia también están dedicadas a plantaciones de insumos para la bioenergía más que para la alimentación.
Sin embargo, con el sorgo dulce sólo los tallos son usados para producir biocombustible, mientras que el grano se guarda como alimento o para darle de comer a los animales.
Este producto no es muy demandado en el mercado mundial de alimentos, de ahí que tenga poco impacto en los precios y en la seguridad alimentaria.
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La primera granja de energía sustentable de Florida comenzó a operar en agosto en Destiny, en el centro del estado. Es un esfuerzo de colaboración que involucra a empresas, individuos y a instituciones de investigación académica que van desde la consultora privada Green Technologies LLC hasta la Universidad de Florida.
El primer experimento agrícola de la Granja de Energía Destiny es la siembra de sorgo dulce, un cultivo resistente a las sequías que se parece al maíz y que a menudo también es usado de modos similares.
Los dos productos derivados más comunes del sorgo dulce son el jarabe y la melaza.
"En última instancia, el objetivo es sacar el máximo de azúcar del sorgo dulce y ver si es comercialmente viable para (elaborar) etanol", explicó Ben Scheffres, de Global Renewable Energy, principal ingeniero del proyecto.
"De algún modo eso es aplicable a las personas no sólo aquí, en Florida, sino en Estados Unidos y en el mundo entero", sostuvo.
Destilar azúcar del sorgo dulce como método para fabricar etanol es algo que ya se hizo antes, pero a una escala mucho menor.
Zane Helsel, profesor visitante de la Universidad de Florida, está involucrado con el proyecto desde comienzos de este año. "Reviso el ritmo de siembra y cosas como qué clase de fertilizantes es necesario usar y cuán bajo hay que plantar las semillas", dijo.
"El Departamento de Energía y el de Agricultura de Estados Unidos han identificado el sorgo dulce como algunos de los cultivos más sencillos usados para producir etanol, pero en el ámbito local se ha investigado muy poco, y (por eso) realmente teníamos que hacerlo", dijo Helsel a IPS.
"Nuestro objetivo es poder suministrar fuentes renovables de energía para estos cultivos (de sorgo dulce). Les damos parte de nuestra pericia sobre asuntos agronómicos, como cuando uno quiere planta para producir alimentos en vez de combustible", explicó Amir Varshovi, presidente de Green Technologies.
Aunque los futuros cultivos experimentales en la Granja de Energía Destiny incluyen a las algas y a la jatrofa, una planta tropical que produce una nuez aceitosa, el experimento del sorgo dulce ahora es el principal objetivo de los ingenieros agrícolas.
La idea es hacer que el establecimiento de Destiny sea totalmente sustentable. Por ejemplo, los motores utilizados allí podrían ser lubricados con el aceite obtenido de la nuez de la jatrofa.
Ya se plantaron ocho variedades de sorgo dulce, así que la cosecha tiene lugar en distintos momentos del año. "Una vez que está suficientemente maduro, hacemos un muestreo del azúcar en el tallo de la planta. Así, ya hemos cosechado una parte. Las variedades de este cultivo maduran a diferentes niveles", explicó Scheffres.
Helsel señaló que "cuando se tiene una temporada de cultivo de 365 días al año, que es lo que en buena medida tenemos aquí, esto da más oportunidades y tiempo para experimentar con el sorgo dulce".
"Lo que vuelve al sorgo dulce viable para el establecimiento energético es que se raciona, lo que significa que cuando uno lo corta crece a partir de nuevos tallos desde la base de la planta", agregó.
El principal problema de la planta de Destiny ha sido el largo proceso burocrático para hacer que el proyecto obtuviera luz verde. Hay constructores que planean edificar allí el primer prototipo de ciudad "ecosustentable" de la nación, con senderos para bicicletas y excursionismo, fuentes de energías renovables limpias y un impacto mínimo sobre el ambiente.
"Nuestra tierra (las casi 17.000 hectáreas que posee Destiny en el centro de Florida) es usada principalmente para preservación y también para agricultura y desarrollo sustentables", dijo Roz Gatewood, vicepresidenta de desarrollo empresarial en el establecimiento de Destiny.
"El proceso legal no será completado hasta 2011; será entonces cuando todas las diferentes agencias de los gobiernos estadual y federal lo aprobarán", señaló.
"Como algunos empresarios están interesados en traer aquí sus plantas de producción, necesitamos mantener a estos propietarios interesados en la granja energética y asegurarnos de que sean continuamente informados sobre lo que estamos haciendo", añadió.
Los dos candidatos presidenciales han encomiado las virtudes de los cultivos amigables con el ambiente para ayudar a Estados Unidos a despegarse del petróleo importado, pero Scheffres cree que el trabajo que se hace aquí sobre diferentes tipos de tecnologías energéticas limpias continuará independientemente de quién sea elegido en los comicios del 4 de noviembre.
"Parte de las razones para hablar sobre todo esto, estoy seguro, se debe a las elecciones presidenciales", admitió Scheffres.
"Pero el precio del combustible hace que la gente se inicie en el tema, y eso es algo que todo el mundo tiene en común", concluyó.