Cuando la ONU aprobó sus ocho Objetivos de Desarrollo para el Milenio, en septiembre de 2000, fijó 2015 como plazo para alcanzar siete de ellos. Pero no estableció una fecha para el octavo: fomentar una asociación Norte-Sur para el desarrollo.
"Los plazos fueron determinados para los pobres, no para los ricos", ironizó un experto en desarrollo que hace un seguimiento del estatus de las metas del Milenio desde su creación.
Los primeros siete Objetivos incluyen reducir a la mitad la proporción de la población mundial que padece pobreza y hambre respecto de 1990, garantizar la educación primaria universal, promover la igualdad de género, reducir la mortalidad infantil y la materna, combatir el sida, la malaria y otras enfermedades y asegurar la sustentabilidad ambiental.
El octavo impone un aumento sustancial en la asistencia al desarrollo, la reducción o cancelación de las deudas de los países pobres, la eliminación de barreras proteccionistas para los productos agrícolas, y el acceso de las naciones en desarrollo a los mercados occidentales.
Un estudio presentado el jueves por la ONU (Organización de las Naciones Unidas) sobre el octavo objetivo indica que, si bien hubo avances en varios puntos, también hay "brechas importantes" en el cumplimiento de los compromisos, en buena medida por parte de los donantes occidentales.
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Estas brechas se dan principalmente en las áreas de asistencia, comercio, alivio de deuda y acceso a nuevas tecnologías y medicinas esenciales a precios adecuados.
"El debilitamiento de la economía mundial y el marcado aumento en el precio de los alimentos y la energía amenazan con revertir algunos de los avances logrados en las varias dimensiones del desarrollo humano", señala el informe de 52 páginas, titulado "Objetivo de Desarrollo del Milenio 8: Resultados de la alianza mundial para alcanzar los objetivos de desarrollo del Milenio".
El reporte fue preparado por el "Grupo de Tareas sobre el desfase en el logro de los objetivos de desarrollo del Milenio", integrado por representantes de más de 20 agencias de la ONU, entre ellas el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (DAES), así como el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio (OMC).
"Este informe hace sonar una fuerte alarma", dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
El principal mensaje es que, aunque hubo avances en varios frentes, el cumplimiento de los compromisos asumidos por los estados miembros de la ONU ha sido deficiente y se ha rezagado, destacó.
"Ya estamos en la segunda mitad de nuestra lucha contra la pobreza. Se nos está terminando el tiempo", advirtió.
En 2007, los únicos cinco países en alcanzar o exceder el objetivo de la ONU de asignar 0,7 por ciento de su producto interno bruto (PIB) a la asistencia oficial al desarrollo fueron Dinamarca, Holanda, Luxemburgo, Noruega y Suecia.
La asistencia financiera para los 50 países menos adelantados —los más pobres del mundo— también está rezagada respecto de los compromisos asumidos.
Además de los cinco donantes de desempeño más elevado, sólo Bélgica, Irlanda y Gran Bretaña han cumplido el objetivo de brindar asistencia a los países menos adelantados, lo que equivale a por lo menos entre 0,15 y 0.20 por ciento de su PIB, mientras que el promedio de la mayoría de los donantes era de 0,09 por ciento.
El año pasado hubo un déficit de 10.000 millones de dólares. La asistencia neta total de los 22 países donantes pertenecientes a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) equivalió a apenas 0,28 por ciento de sus PIB combinados, en oposición al objetivo de la ONU de 0,7 por ciento.
"Si queremos cumplir el objetivo de 2010 fijado en la cumbre del Grupo de los Ocho (G-8) en 2005, la asistencia al desarrollo tiene que aumentar 18.000 millones de dólares al año. De eso, 7.300 millones de dólares tendrían que dirigirse a África", dijo Ban a los periodistas.
En cuanto al comercio, agregó, el no concluir la denominada Ronda de Desarrollo de Doha de negociaciones multilaterales constituye la mayor brecha de implementación. Aunque la asistencia para el comercio aumentó en términos reales, ha caído como un porcentaje de la asistencia al desarrollo.
"Los países más pobres del mundo todavía están marginados, y muchos han sido muy golpeados por los elevados precios de los alimentos y la energía", dijo Ban.
"Necesitamos movernos más rápidamente para reducir los subsidios internos y a las exportaciones agrícolas en los países industrializados, y para abordar otras barreras a las exportaciones y al crecimiento de la productividad agrícola de los países en desarrollo", añadió.
Al ser consultado sobre cuán confiado estaba en que el octavo Objetivo del Milenio se cumpla para 2015, el principal autor del informe, Rob Vos, dijo a IPS que "cumplir o no el plazo es esencialmente una cuestión de voluntad política y de prioridad entre los socios globales".
En relación al alivio de la deuda, señaló que se ha demostrado que esos ambiciosos objetivos se pueden cumplir. "Nosotros todavía no estamos allí, pero buena parte de los países aptos (para recibirlo) sí recibieron el sustancial alivio de deuda prometido", dijo.
Está claro que se necesita hacer más y que los esfuerzos tienen que acelerarse.
"Lo que hemos intentado a través del informe es hacer explícito a los socios mundiales (gobiernos de países ricos y pobres por igual, así como el sector privado) dónde están fallando en el cumplimiento de los compromisos asumidos. Esperamos que esto ayude a persuadir a los socios de seguir adelante", dijo Vos, director de Desarrollo y Análisis de Políticas del DAES.
También señaló que el octavo Objetivo es el reconocimiento de que sin el apoyo y la cooperación internacional puede no ser posible lograr los otros siete.
Por ejemplo, sin un sistema comercial multilateral justo y equitativo, los países más pobres afrontarán dificultades para beneficiarse de un comercio más abierto bajo la forma de más crecimiento y de una mayor reducción de la pobreza.
"Sin un adecuado alivio de la deuda, los gobiernos de países altamente endeudados tendrán grandes dificultades para asignar suficientes recursos a la educación, la salud, etcétera, para cumplir los otros Objetivos del Milenio", agregó.
Al ser consultado sobre si es justo para las naciones en desarrollo que sólo el octavo Objetivo no tenga un plazo rígido comparado con los otros siete, Vos declaró a IPS que, "en principio, se aplica el mismo calendario para el Objetivo ocho".
Sin embargo, el problema con las metas del octavo Objetivo del Milenio es que algunas no son muy específicas ni están muy cuantificadas, agregó.
Esto sólo mejoró parcialmente en cumbres que tuvieron lugar luego de la Declaración del Milenio de 2000, como la cumbre del G-8 realizada en 2005 en Gleneagles, Escocia, donde se fijaron objetivos más específicos (con un plazo determinado) para la asistencia al desarrollo y alivio de deuda adicional.
También en relación al comercio, la OMC tuvo marcos temporales específicos para ponerse de acuerdo en torno a la Ronda de Doha, pero estos fueron continuamente postergados y ahora las negociaciones están estancadas, dijo Vos.
Para proveer a los países pobres de medicinas esenciales a precios accesibles y garantizar el acceso a nuevas tecnologías, no se fijó ningún plazo ni hay acuerdos específicos sobre objetivos verificables, admitió.
No obstante, el informe intenta dejar en claro qué clase de avances se hicieron en ese sentido, además de cómo definir de modo más preciso qué debería significar un mejor acceso a medicinas y tecnologías a fin de que los socios globales adopten acciones más efectivas.
El estudio presentado el jueves también es considerado un insumo importante para una reunión de alto nivel sobre los Objetivos del Milenio prevista para el 25 de este mes en Nueva York, durante la 63 sesión de la Asamblea General de la ONU.
Al pedirles a los líderes mundiales que anuncien sus planes y propuestas específicas, la reunión de alto nivel debería preparar el terreno para una conferencia decisiva sobre financiamiento para el desarrollo que tendrá lugar en noviembre en Doha, dijo el secretario general de la ONU.
