El jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y el mandatario electo de Uruguay, Tabaré Vázquez, participaron este jueves en Santiago en una minicumbre socialista con el presidente de Chile, Ricardo Lagos, en la que se plantearon nuevas dimensiones para los procesos de integración.
Mientras Rodríguez Zapatero subrayó su disposición a promover un mayor compromiso de la Unión Europea (UE) con América Latina, Vázquez y Lagos concordaron en la necesidad de dar un mayor contenido político al Mercado Común del Sur (Mercosur).
El político socialista uruguayo, quien asumirá la presidencia el 1 de marzo, fue invitado especial de Lagos a los actos protocolares de la visita a Chile de Rodríguez Zapatero, quien finalizó este mediodía una gira por América del Sur que incluyó también a Brasil y Argentina.
Lagos, Rodríguez Zapatero y Vázquez tuvieron un desayuno de trabajo de carácter privado en la residencia particular del presidente chileno, donde pasaron revista tanto a las perspectivas de las relaciones bilaterales como de la cooperación internacional en un puente trasatlántico que conecta a la UE con el Mercosur.
Lagos es considerado en Chile el líder natural del bloque de los partidos Socialista y Por la Democracia, que conforman el ala progresista de la Concertación por la Democracia, coalición que gobierna a Chile desde que terminaron en 1990 los 17 años de dictadura del general Augusto Pinochet.
La coalición está integrada además por el Partido Radical Socialdemócrata, así como por la Democracia Cristiana, que mantenía vínculos políticos con el anterior gobierno español, encabezado por José María Aznar, del Partido Popular.
Rodríguez Zapatero, quien desplazó a los populares del gobierno en los comicios de marzo de 2003 como abanderado del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), desplazó el eje de la política exterior de Aznar, identificada con Estados Unidos, a una firme integración con la UE, y dio prioridad a los vínculos con América Latina.
Vázquez, quien al igual que Lagos es considerado un socialista de tendencia moderada, jurará como presidente de Uruguay el 1 de marzo tras el triunfo en las urnas de la coalición Frente Amplio que puso término a la secular hegemonía de los tradicionales partidos Colorado y Blanco.
La presencia simultánea en Santiago de Rodríguez Zapatero y Vázquez ha dado lugar con Lagos a esta minicumbre socialista con tres líderes que se caracterizan tanto por su progresismo como por el realismo de sus posiciones en la escena internacional, dijo a IPS un funcionario de la cancillería chilena.
Rodríguez Zapatero fortaleció también en esta gira los vínculos de Madrid con los gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil y de Néstor Kirchner en Argentina, que también se inscriben en esta vertiente de reivindicación de los vínculos de América Latina con Europa como contrapeso a la hegemonía de Washington, agregó la fuente.
Este virtual bloque del Cono Sur latinoamericano con España representa a ojos de los analistas una tendencia que en la arena internacional rescata el multilateralismo en oposición a la política unipolar que busca imponer el gobierno estadounidense de George W. Bush.
Pero a la vez se trata de una tendencia que en términos generales no adopta posiciones beligerantes ante los Estados Unidos, lo cual lo diferencia de la entente más radicalizada que conforman los gobiernos de Hugo Chávez de Venezuela y Fidel Castro de Cuba, según expertos internacionales.
De las reuniones sostenidas por los tres líderes socialistas en Santiago surgió un manifiesto respaldo a las gestiones de Lula para mediar en el actual conflicto entre Chávez y el presidente colombiano Álvaro Uribe por el secuestro en tierras venezolanas del jefe guerrillero colombiano Rodrigo Granda.
Rodríguez Zapatero reiteró en Santiago su voluntad para ejercer buenos oficios en contenciosos comerciales, como el conflicto por los salmones de Chile en la UE, y al mismo tiempo llamó a los empresarios hispanos a favorecer con sus inversiones a las pequeñas y medianas empresas en América Latina.
Vázquez coincidió con Lagos en la necesidad de ampliar la visión integracionista del Mercosur, para que tenga características de un grado de integración política y no meramente una unión aduanera, según dijo el mandatario electo uruguayo.
Chile es desde 1996 asociado externo del Mercosur. Desde 1991, cuando Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay crearon este bloque, los chilenos se excusaron de participar como socios plenos por la incompatibilidad entre los sistemas arancelarios.
Con Uruguay tenemos una común mirada de cómo desarrollarnos, de cómo tener crecimiento y cómo tener políticas sociales, dijo Lagos, quien elogió el programa de emergencia social que Vázquez planea desarrollar cuando asuma el gobierno.
El presidente electo uruguayo dijo, a su vez: "Vamos a conformar la conjunción de pensamientos que tienden a buscar con soluciones concretas mejoras a las condiciones de vida de nuestros pueblos. Es necesario que América Latina elabore un proyecto político propio que realmente mejore las condiciones de vida de su gente.
Vázquez agregó que esa es una tarea política pendiente que demanda sumar voluntades del Mercosur y de la Comunidad Andina de Naciones.
El futuro mandatario uruguayo comprometió asimismo el respaldo de su gobierno a la candidatura a secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) del actual ministro del Interior de Chile, José Miguel Insulza.
Este mismo jueves, desde Washington, se anunció a su vez el respaldo del gobierno de Bush al ex presidente salvadoreño Francisco Flores, quien también se postula a la secretaría general de la OEA. (FIN/IPS/ggr/mj/ip/05)