ESTADOS UNIDOS: Veto oficial a un profesor musulmán

El gobierno de Estados Unidos niega al reconocido académico islámico Tariq Ramadan, ciudadano de Suiza, la visa para ingresar al país para dar clases en la Universidad de Notre Dame.

El Departamento de Estado (cancillería) revocó la visa de Ramadan en el último minuto al amparo de la Ley Patriótica, sancionada a raíz de los atentados que dejaron 3.000 muertos en Nueva York y en Washington el 11 de septiembre de 2003.

La norma prohíbe el ingreso al país de extranjeros que hayan ”usado una posición de relevancia para adherir o abrazar la actividad terrorista”, explicó a la agencia The Associated Press un portavoz del Departamento (ministerio) de Seguridad Interna, Russ Knocke.

Pero Knocke no detalló las acciones de que se acusa a Ramadan. Tampoco lo hizo ningún funcionario del gobierno de George W. Bush. En cambio, universitarios de todo el país reconocen las credenciales profesionales y la moderación del experto.

La inesperada medida causó sorpresa e indignación en el mundo académico. La Universidad de Notre Dame en South Bend, Indiana, había contratado a Ramadan para enseñar filosofía y ética islámicas. Había solicitado y obtenido la visa en mayo.

”Respaldamos plenamente a Tariq Ramadan y estamos orgullosos por haberlo designado”, dijo Scott Appleby, director del Instituto de Estudios Internacionales para la Paz en esa universidad.

”Exigimos la anulación de la medida o algún tipo de información más sólida sobre las razones que condujeron a ella”, agregó, entrevistado por una emisora de radio.

La revocación de la visa, decidida por el Departamento de Estado a iniciativa del de Seguridad Interna, sorprendió a los académicos, en especial porque el trabajo de Ramadan está consagrado a la conciliación entre el mundo islámico y el occidental.

Su obra bibliográfica incluye títulos como ”Ser un musulmán europeo” y ”Musulmanes occidentales y el futuro del Islam”. La revista Time lo consideró una de las personalidades más influyentes del año 2003.

”La cuestión ahora es la libertad de cátedra”, dijo Ramadan al programa de radio ”Democracy Now!”.

”Tengo una fuerte voz, pero estoy en contra de toda forma de violencia. Trato de construir puentes entre musulmanes y entre el mundo islámico y Occidente para que vivamos juntos”, agregó el experto.

”Esta es una cuestión muy importante para todos los ciudadanos de Estados Unidos. ¿Este es el modo en que estamos tratando de relacionarnos con el mundo islámico?”, se preguntó.

Criado en Ginebra, Ramadan confronta la alienación que percibe entre Islam y modernidad, y con frecuencia ha advertido sobre los peligros del aislamiento religioso. Es muy popular en Europa, particularmente entre los jóvenes musulmanes.

El año pasado, sólo en Francia, se vendieron 50.000 cintas grabadas de sus conferencias.

Dentro del campus y fuera de él, muchos se manifiestan en apoyo del experto.

”Esta decisión pone en peligro la libertad de cátedra. Promover la voz de Ramadan va en beneficio de los intereses estadounidenses”, dijo el presidente de la Asociación de Estudiantes Musulmanes de este país, Habia Mbarak.

La asociación convoca una movilización en respaldo de Ramadan y por la protección de las libertades de cátedra y de expresión en todas las universidades estadounidenses para el día 24 de este mes.

Mbarak consideró que la decisión del Departamento de Estado es ”discriminación pura”. ”Es crucial construir puentes con el mundo musulmán”, sostuvo.

El director ejecutivo del Consejo de Relaciones Estadounidense-Islámicas (CAIR), Nihad Awad, envió una carta de protesta al secretario (ministro) de Seguridad Interna, Tom Ridge.

”Espero seriamente que reconsidere su decisión y que permita a este académico internacionalmente reconocido ayudar a construir puentes entre el mundo musulmán y Estados Unidos”, advierte la carta.

”Esta última acción hacia una personalidad tan afamada dificultará innecesariamente nuestra tarea de entender el mundo musulmán”, agregó Awad.

Mientras, la Asociación de Estudiantes Musulmanes de Notre Dame también procura apoyo para que se revise la revocación de la visa de Ramadan, dijo la dirigente de la organización Priscilla Wong.

Para ello, comenzaron a recoger firmas en respaldo de una petición al Departamento de Estado. Hasta ahora, dijo Wong, la respuesta de los universitarios ha sido positiva.

No es la primera vez que Tariq Ramadan es objeto de controversia. Ya ha sido acusado de antisemitismo y de vínculos con organizaciones radicales egipcias.

Su abuelo, Hassan al-Banna, fue el fundador en Egipto de la Hermandad Musulmana, el primer grupo islámico radical de la era moderna.

Pero no hay evidencia alguna sobre su supuesto involucramiento con esa organización ni con ninguna otra de tipo radical, y él mismo ha desacreditado toda versión en ese sentido.

El gobierno estadounidense estaba al tanto de tales acusaciones cuando le concedió la visa, y la Universidad de Notre Dame, a su vez, las consideró infundadas tras investigarlas.

”Lo contratamos, pensamos que era un buen contrato y tenemos buenas razones”, dijo el presidente de la Universidad, el clérigo protestante Edward Malloy, al periódico universitario The Observer.

También la Sociedad de Estudiantes Judíos de Derecho de la Universidad avalaron la contratación de Ramadan. ”No sabemos de nada en la historia del profesor Ramadan que indique que presenta una amenaza para nuestro país o para nuestra universidad”, indicó la organización.

”El profesor Ramadan está comprometido en un proyecto académico y político que desafía a musulmanes, cristianos y judíos de Occidente a revisar profundamente sus nociones de identidad, tolerancia y coexistencia. Esperamos que el Departamento de Seguridad Interna le permita ser parte de la comunidad de Notre Dame”, agregaron

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe