La Unión Europea (UE) avaló la eliminación de subsidios agrícolas y el recorte de subvenciones propuesta a último momento por la cúpula de la OMC para salvar la Ronda de Doha de negociaciones multilaterales de comercio.
La iniciativa, presentada el viernes por el director general de la OMC (Organización Mundial del Comercio), Supachai Panitchpakdi, y por el presidente del Consejo General de la institución, Shotaro Oshima, es un paso en la dirección correcta, indicó este martes la UE.
El documento de Panitchpakdi y Oshima contiene los lineamientos para la fase final de la Ronda de Doha para el Desarrollo, cuyo inicio está previsto para fines de este mes.
La ronda mundial de negociaciones para reformar el comercio internacional fue lanzada por la Conferencia Ministerial de la OMC celebrada en la capital de Qatar en 2001, y se espera que termine el 31 de diciembre.
Sin embargo, esa meta quedó muy lejana luego del fracaso de la Conferencia Ministerial de la OMC realizada en septiembre pasado en el sudoriental balneario mexicano de Cancún, debido al rechazo de los países del Sur en desarrollo a los abultados subsidios que otorga el Norte industrializado a su producción agrícola.
El objetivo del borrador presentado por la OMC es darle un nuevo impulso a la Ronda y servir como marco para el último tramo de las negociaciones.
El texto, que será debatido por el Consejo General de la OMC en Ginebra esta semana, propone la eliminación de los subsidios a las exportaciones agrícolas y un importante recorte de las subvenciones a la producción, así como de las protecciones aduaneras y de las tarifas industriales.
A pesar de las críticas iniciales de los países del Sur en desarrollo y de analistas de las organizaciones no gubernamentales especializadas, la Comisión Europea (brazo ejecutivo de la UE) sostuvo que la propuesta de la OMC será útil para guiar las negociaciones pendientes.
El documento divulgado por la OMC el viernes es, desde nuestro punto de vista, una buena base para el trabajo que está por delante, dijo el lunes a periodistas la portavoz de la UE para asuntos comerciales, Arancha González.
No obstante, nos parece que el texto todavía necesita varias aclaraciones y precisiones, y es en esto que vamos a trabajar en los próximos días con nuestros socios de la OMC en Ginebra, añadió.
González subrayó que la Comisión Europea está decidida a lograr la máxima reducción de las tarifas a los bienes industriales, y considera que el texto de la OMC propone un recorte insuficiente.
El texto busca el equilibrio entre un alto nivel de ambición, como el nuestro, y un nivel bajo de ambición que ya fue expresado por varios países, señaló.
González dijo también que la Comisión Europea desea que el borrador haga una mayor precisión sobre el tema de los servicios, y que incluya un plazo para que los miembros de la OMC mejoren sus ofertas.
La portavoz se negó a decir si la UE confía en que se llegará a un acuerdo sobre la base de este texto para los próximos días.
Nosotros no estamos en el negocio de las apuestas, y por eso no podemos decir qué porcentaje de probabilidades tenemos de alcanzar este acuerdo para los últimos días de julio, señaló.
Los funcionarios de la UE a cargo de la agricultura también respaldaron el borrador.
Nuestra percepción es que el documento va en la dirección correcta. Se trata sin ninguna duda de un avance, no de un retroceso, lo cual no es siempre obvio en estas negociaciones tan delicadas, dijo el portavoz de la UE para la Política Agraria Común, Gregor Kreuzhuber.
Nosotros queremos la eliminación de los subsidios a las exportaciones y de todos los elementos distorsionantes del comercio que se aplican en las estrategias para competir en exportaciones. En eso el texto no es muy claro, añadió.
Muchos advierten que, a menos que se acuerde un marco para las negociaciones a fines de este mes, la Ronda de Doha podría quedar marginada en una futura agenda de la ampliada UE y del próximo gobierno de Estados Unidos, que será elegido en noviembre.
Y aun si se llega a un acuerdo en los próximos días, será alcanzar apenas la mitad del camino hacia un pacto para liberalizar el comercio mundial de productos agrícolas, servicios y bienes industriales.
La decisión final sobre la propuesta la tomará el Consejo General, organismo rector de esta entidad de 147 países miembro en los intervalos de las conferencias ministeriales.