NIGERIA: Festejo por liberación de Amina Lawal

Organizaciones de derechos humanos aplaudieron el fallo de un tribunal islámico de Nigeria que puso en libertad a Amina Lawal, sentenciada el año pasado a ser lapidada por cometer adulterio.

La Corte de Apelaciones de Funtua, en el septentrional estado nigeriano de Katsina, concluyó este jueves que la sharia (ley islámica, bajo la cual fue juzgada Lawal) no estaba vigente en el distrito cuando se cometió el delito.

”Son muy buenas noticias. Si se hubiese ratificado la condena, no había muchas opciones para volver a apelar. Estamos felices de que el tribunal la haya liberado antes de tener que recurrir a un perdón del gobernador”, sostuvo Okeke Anyia, de la organización no gubernamental GADA, con sede en Lagos.

Los miembros de la no gubernamental Alternativas para la Protección y el Progreso de los Derechos de la Mujer, con sede en Abuja, que proporcionaron asistencia legal a Lawal, también celebraron la decisión del tribunal islámico.

”Estoy muy feliz por Lawal y también por nuestra organización. Nuestros esfuerzos no fueron en vano”, afirmó un portavoz del grupo.

La coordinadora nacional de la organización Mujeres en Nigeria, Toro Oladapo, calificó la resolución judicial de ”encomiable”.

”Estoy feliz pues no se sentó ningún precedente sobre la lapidación de una mujer por adulterio. Agradezco a todos los que nos apoyaron, tanto en el ámbito local como internacional en la lucha contra la condena a Lawal”, dijo Oladapo a IPS este jueves.

La activista señaló que la ejecución de Lawal habría sido un terrible antecedente para toda Nigeria.

”Agradecemos a Dios que haya sido liberada. Estoy feliz de que no tuvimos que rogarle al gobierno estadual que la perdonara”, señaló.

La ley islámica fue introducida en 12 estados del norte de Nigeria, país de 120 millones de habitantes, en los últimos años, lo cual somete a la población local a penas crueles y humillantes, como amputaciones por robar y azotes públicos por consumo de alcohol.

Una coalición de 30 organizaciones de derechos humanos había hecho el miércoles un pedido de último minuto para salvar la vida de Lawal.

En una declaración, firmada por el jefe de programas del Centro de Defensa, Documentación e Investigación para la Mujer, Titi Salaam, la coalición condenó la ”parcialidad de género” y la actitud general de los tribunales islámicos nigerianos.

”Sólo las mujeres acusadas de cometer adulterio son juzgadas y sentenciadas. Los hombres siempre logran escapar por una supuesta falta de evidencia”, señala el documento.

Mujeres sudafricanas, apoyadas por el gobernante partido Congreso Nacional Africano, realizaron una manifestación frente a la embajada de Nigeria en Pretoria la semana pasada, decididas a presionar para la liberación de Lawal.

El obispo católico de Lagos, Olubunmi Okogie, también celebró la decisión del tribunal y subrayó que el derecho fundamental de los seres humanos es el de la vida.

Lawal, de 31 años, fue sentenciada en marzo de 2002 por mantener relaciones extramatrimoniales. Lawal dio a luz una niña más de nueve meses después de haberse divorciado.

La mujer apeló ante el Tribunal Superior de la Sharia, pero esta corte confirmó la sentencia en agosto del año pasado y además la instó a entregar a su hija. La lapidación debía realizarse este año.

El abogado de Lawal, Aliyu Musa Yawuri, arguyó en la segunda apelación en agosto pasado que en la ley islámica se prevé que una mujer puede llevar en su vientre ”un embrión dormido por un período de cinco meses, comenzando desde la fecha del divorcio”.

”Lawal había estado divorciada desde hacía unos 10 meses cuando tuvo a su hija, y por eso el tribunal debió haber aplicado la ley en su favor”, dijo el abogado, e informó que su defendida retiró su confesión de culpabilidad, efectuada en marzo de 2002.

Sin embargo, los cinco jueces señalaron que la confesión no podía retirarse sin que a cambio se presentara una explicación plausible sobre su embarazo, y fijaron la fecha del fallo final para este jueves.

Cientos de miles de firmas fueron recolectadas por activistas de Nigeria y de todo el mundo, entre ellos Estados Unidos, para salvar la vida de Lawal.

”Estamos muy preocupados por este caso en particular. El juicio no es compatible con la Constitución de Nigeria ni con sus compromisos ante la Carta Africana de Derechos Humanos. Esperamos que a la mujer se le conceda el derecho de apelar”, había dicho en agosto el portavoz de Amnistía Internacional, Steven Callow.

El gobierno de Olusegun Obasanjo, preocupado por el impacto negativo que tendría la condena a nivel internacional, había advertido que nadie sería ejecutado por lapidación.

”Hay tribunales superiores para examinar el caso. El gobierno nigeriano nunca ignoró los derechos de sus cuidadanos y no se va a quedar con las manos cruzadas si son amenazados. Vale la pena decir que en la historia judicial de Nigeria nunca fue castigada una mujer como se pretende en este caso, y ésta no va a ser la excepción”, dijo en una oportunidad el ex canciller Duben Onyia.

”La Constitución nigeriana es lo más importante en este caso. La ley federal es la que tiene siempre la prioridad”, explicó.

Lawal es la segunda mujer liberada por un tribunal superior islámico luego de una condena a lapidación por adulterio.

Safiya Hussein, otra sentenciada por haber concebido un hijo en relaciones extramatrimoniales, fue liberada por un tribunal de apelaciones gracias a la fuerte presión internacional y la intervención del gobierno.

De esta manera, Nigeria escapó por poco de sufrir un creciente aislamiento internacional, por segunda vez desde el régimen del general golpista Sani Abacha (1993-1997), quien cometió reiteradas violaciones a los derechos humanos.

Hussein es ahora ciudadana italiana. (

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe