Mantener con firmeza la protección ambiental de la Antártida, preservar la biodiversidad, reforzar los estudios sanitarios de la fauna y la transparencia científica son temas centrales en la reunión del Tratado Antártico que se realiza en España.
El aumento del turismo, la actividad en las bases científicas, la navegación mercantil y de pesca y el recalentamiento de la atmósfera amenazan la salud ambiental de la región, según delegados a la XXVI Reunión Consultiva del Tratado Antártico, que finalizará este viernes en Madrid.
Preservar la salud del ambiente antártico es indispensable para el desarrollo sustentable del resto del mundo y para mantener la riqueza pesquera en los mares, señaló este miércoles a IPS el canciller de Perú, Allan Wagner.
De ese modo Wagner, de visita oficial en España, se refirió a la importancia de los acuerdos que se impulsen en el encuentro de los estados partes del Tratado Antártico, que comenzó el 9 de este mes.
El tratado,firmado el 1 de diciembre de 1959, entró en vigor dos años después y lo integran 45 países, entre ellos Argentina, Australia, Chile, India, Malasia, Nueva Zelanda, Perú, Sudáfrica y Uruguay.
También forman parte países del Norte industrializado, como Estados Unidos, China, Francia, España, Rusia, Italia, Gran Bretaña y Suecia.
Los firmantes del Tratado acordaron que la Antártida se utilizaría solo para fines pacíficos, que no se harían nuevas reclamaciones de soberanía nacional sobre toda o parte de esa zona y que en la misma quedarían prohibidas la eliminación de desechos radiactivos y las explosiones nucleares.
Un tema no abordado en 1959 fue el del turismo, inexistente en el continente en aquella época, pero que en los últimos años ha registrado un importante incremento.
Al respecto, la delegación española a la reunión de Madrid reclamó que el turismo sea "no consuntivo" (no destructivo), lo cual requiere "del refuerzo de la seguridad de la navegación y de la protección del entorno marino frente a los daños medioambientales causados por buques".
También recordaron los españoles que en el plan del Tratado se destaca "la importancia del mantenimiento de la biodiversidad en áreas marinas vulnerables, incluyendo las que se encuentran más allá de las jurisdicciones nacionales".
La preservación de la salud ambiental de la Antártida debe asegurarse por el valor en sí mismo del continente, pero también por su influencia en el resto del planeta, señaló Wagner, quien el 16 de febrero viajó a la base peruana ubicada en la isla del Rey Jorge "para demostrar el interés de Perú".
"No debemos olvidar que la cadena de nutrientes para la fauna marina en la que se sustenta nuestra industria pesquera se origina en la Antártida", puntualizó el ministro.
Un estudio presentado en la conferencia por los investigadores chilenos Olivia Blank y Daniel Torres indica que en investigaciones realizadas desde 1998 a 2002 se llegó a la evidencia de que hay tres enfermedades que afectan a animales marinos y que son zoonóticas, o sea que pueden ser transmitidas a las personas.
Por eso fue bien acogida entre los asistentes la propuesta de que se refuerce la investigación sobre la situación sanitaria de vertebrados superiores, para medir el alcance de las enfermedades en los mismos y determinar cuáles son llegadas de otras zonas y provocadas por acciones humanas y cuáles son autóctonas.
La delegación chilena también informó sobre un proyecto para instalar en la base Eduardo Frei Montalva un invernadero hidropónico, para el cultivo de plantas en aguas, así como para instalar generadores de energía eólica, a efectos de aprovechar las fuentes vientos de la zona.
Por su parte, la delegación uruguaya indicó que, para reforzar la transparencia de los trabajos científicos realizados en la base General José Artigas, ha distribuido la información por canales diplomáticos y por dos sitios en Internet, uno del Instituto Antártico Uruguayo y otro de Argentina y Australia.
También se examinó ampliamente el informe chileno sobre la exploración aérea de los glaciares del mar de Amundsen y de la península Antártica, realizados por la armada de ese país en colaboración con la agencia espacial estadounidense (NASA) y el Centro de Estudios Científicos de Valdivia, Chile.
Según el informe, se comprobó la desintegración de algunas plataformas flotantes, la aceleración de la caída de glaciares interiores, y se obtuvieron datos para prever futuros cambios en los mismos.
Sin embargo, los delegados reunidos en Madrid plantearon sus reservas sobre las propias investigaciones, algo que se evidenció al tratar las perforaciones con fines científicos que realiza Rusia en el lago subglacial Vostok.
Delegados de Australia, Francia, Noruega, Nueva Zelandia, Estados Unidos expresaron preocupación ante la posibilidad de que se produjera una penetración accidental no prevista, con la consiguiente contaminación del lago.
La representación rusa puso énfasis en defender la prosecución de las perforaciones "en aras de la investigación científica".
Pero la mayoría coincidió en que existe la probabilidad de contaminación accidental, por fallas del hielo o problemas en la perforación.
Para evitar eso, se aconsejó realizar pruebas antes de proseguir con las perforaciones, para lograr una mayor solidez ambiental de las tecnologías propuestas. ***** + Tratado Antártico (http://www.opanal.org/NWFZ/Antartico/Anartic-e.htm) + Instituto Antártico Uruguayo (http://www.iau.gub.uy/)
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