Los precios internacionales del crudo subieron nueve por ciento esta semana, por la expectativa de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) recorte su oferta en la reunión prevista para el 24 de este mes en Viena.
El West Texas Intermediate, crudo de referencia estadounidense, se vendió en Nueva York a 30,55 dólares por barril de 159 litros, 2,59 dólares sobre su precio de la semana precedente.
El Brent, marcador del mar del Norte, se transó en Londres a 26,03 dólares el barril, 1,18 dólares más que la semana anterior, y en Tokio se hicieron este viernes contratos de largo plazo (para entregas en septiembre) a 23,68 dólares, un precio 2,8 por ciento más alto que los de operaciones similares el jueves.
La canasta de siete crudos marcadores de la OPEP se mantuvo estable por encima de los 25 dólares el barril durante la semana, por encima del promedio de 24,52 dólares en la semana concluida el viernes 11, informó la secretaría de la OPEP.
La reunión del jueves 24 fue convocada con carácter urgente por el presidente de la OPEP y ministro de Petróleo de Qatar, Abdullah al-Attiyah, quien afirmó que hay en el mercado un exceso de oferta de dos millones de barriles diarios, y debemos concentrarnos en su manejo.
Los miembros de la OPEP son Arabia Saudita, Argelia, Emiratos Arabes Unidos, Indonesia, Irán, Iraq, Kuwait, Libia, Nigeria, Qatar y Venezuela.
Diez de esos 11 países se reparten, mediante un sistema de cuotas, la oferta de 24,5 millones de barriles diarios, aunque casi todos exceden el límite convenido, según firmas de consultoría que auditan el mercado mundial, consumidor diario de unos 77 millones de barriles.
Iraq, bajo acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, producía al margen del sistema de cuotas más de dos millones de barriles diarios antes de que la invasión de ese país por fuerzas de Washington y Londres, que derrocaron al presidente Saddam Hussein, paralizara la extracción de crudo en las últimas semanas.
Hasta este viernes no se sabía si habrá un representante de Iraq en la cita de Viena, a la cual habría asistido en otras circunstancias el ministro Amir Mohamed Rashid, del gabinete de Saddam Hussein. Las especulaciones sobre un eventual retiro iraquí de la OPEP acompañaron todo el conflicto en el Golfo.
En las semanas previas a la guerra, productores petroleros vecinos de Iraq incrementaron su oferta, en especial Arabia Saudita, que despachó a bordo de grandes buques-tanque unos 22 millones de barriles con destino a territorio estadounidense.
Esa saturación del mercado y la perspectiva de que el Iraq de posguerra entregue volúmenes de crudo cada vez mayores bajo la tutela de Estados Unidos, el mayor consumidor mundial, determinaron que los precios de abril cayeran 25 por ciento en relación con los de marzo.
Autoridades de Argelia, Indonesia, Irán, Qatar y Venezuela abogaron por recortar la oferta de la OPEP para sostener los precios, pero aún no ha opinado Arabia Saudita, el mayor productor con una cuota de 7,9 millones de barriles diarios, pero que habría producido 9,4 millones de unidades durante marzo según fuentes secundarias (firmas especializadas).
Las fuentes secundarias dicen que hay dos millones de barriles por día de exceso en el mercado, y por eso vamos a pedir disciplina en la reunión de la OPEP, adelantó el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez.
La indisciplina incluye incumplimientos de cuotas de producción en la OPEP y sobreproducción en los no-OPEP, agregó Ramírez.
En los últimos años, la OPEP pactó con Angola, México, Noruega, Omán y Rusia, productores de petróleo que no la integran, una restricción en la oferta para evitar caída de precios.
Uno de los factores que agitó el mercado en los meses previos a la guerra fue una huelga en diciembre y enero en Venezuela contra el presidente Hugo Chávez, que interrumpió durante semanas la producción del país, de casi 3 millones de barriles diarios, y sus exportaciones de 2,4 millones de unidades por día, de las cuales 1,5 millones iban a Estados Unidos.
Otros productores tomaron su lugar, y en febrero México fue el principal abastecedor de petróleo al mercado estadounidense, con 1,49 millones de barriles diarios, seguido por Canadá (1,40 millones por día) y Arabia Saudita (1,39 millones diarios), mientras Venezuela apenas exportó a Estados Unidos 559.000 barriles por día, el nivel más bajo desde 1989.
Ramírez dijo que Caracas no pedirá por eso a la OPEP una cuota mayor, sino autorización para compensar a lo largo del año lo que no pudo producir ni exportar durante los meses en que su industria estuvo semiparalizada.
También Nigeria dejó de entregar durante semanas un tercio de los dos millones de barriles diarios que produce habitualmente, luego que disturbios étnicos afectaron la extracción en el delta del Níger, pero aun así la oferta mundial se mantuvo elevada.
El excedente de producción respecto al consumo es mucho menos importante de lo que ciertos artículos dan a entender, advirtió Robert Mandil, director de la Agencia Internacional de Energía, que agrupa a los Estados importadores industrializados, quien desaconsejó un recorte de la oferta mundial de petróleo.
El secretario de Energía de Estados Unidos, Spencer Abraham, observó que a mediados de este año podría disminuir la oferta de gasolina en su país, debido a que los inventarios son menores de lo que quisiéramos.
Cuando lleguemos a la temporada de viajes (en el verano boreal) comenzaremos a ver cierta presión en el mercado, explicó.