Las autoridades de Cuba llevan a cabo una intensa redada antinarcóticos, tras reconocer la existencia de un «incipiente» mercado interno de drogas, confirmó este viernes la Central de Trabajadores de Cuba (CTC).
«El Ministerio del Interior ejecuta importantes acciones para combatir este mal», dijo la CTC en un comunicado, en el que anunció su respaldo «a todo cuanto haga el país para librarnos de la droga».
Las acciones policiales se llevan a cabo en todo el país, pero se desconoce el volumen de drogas incautadas, así como la cantidad y nacionalidad de las personas detenidas.
Las batidas habrían comenzado hace dos semanas. El gobierno admitió, el 10 de este mes, la existencia de estos delitos en el país, cuya situación geográfica lo hace vulnerable al tráfico de drogas hacia Estados Unidos y Europa.
"El pasado fin de semana hubo un allanamiento cerca de mi casa, en Centro Habana. Cerraron toda la manzana y dicen que encontraron cocaína escondida en varias bandejas de huevos", relató a IPS el fontanero Juan Cortés, de 27 años.
Cada huevo había sido vaciado por un pequeño agujero, llenado con cocaína, vuelto a cerrar y nuevamente colocado en la bandeja de cartón, con la parte perforada hacia abajo.
Los huevos tienen gran demanda en el mercado ilegal de productos alimenticios, conocido como "bolsa negra".
"La CTC y los 19 sindicatos nacionales apoyamos con toda energía", las acciones antidrogas, y "apoyaremos igualmente todo cuanto el país haga en el futuro para salvaguardar a la población de tan perniciosas manifestaciones", afirma el comunicado.
La central sindical exhortó a sus afiliados a "elevar la vigilancia" en los centros laborales y a mantener una "postura alerta" en los vecindarios para "descubrir y denunciar a los delincuentes".
De acuerdo a la declaración, las personas involucradas en la venta de estupefacientes suelen organizar "sus operaciones desde las casas de vecindad que son alquiladas violando las disposiciones establecidas".
Los poseedores de viviendas autorizados a arrendar habitaciones a turistas extranjeros deben pagar impuestos y están obligados a registrar a sus huéspedes en la oficina de inmigración.
"A nosotros no nos ha molestado la policía porque tenemos todo en orden, pero me imagino que los que alquilan ilegalmente no la estarán pasando nada bien", comentó al respecto un hombre que hacía fila en un banco para pagar sus impuestos.
El combate a las drogas se vincula "a la (batalla) que estamos librando los trajadores cubanos contra toda forma de delito, de ilegalidades y de corrupción, males que constituyen caldo de cultivo para la proliferación de flagelos como el de la droga", subrayó la CTC.
En un artículo editorial el 10 de este mes, el periódico oficialista Granma aseguró que entre 1995 y noviembre de 2002 fueron detenidos 252 extranjeros por tráfico de drogas, 146 de los cuales permanecen encarcelados cumpliendo condenas o en espera de juicios.
El periódico admitió que narcotraficantes de otros países se han asociado con "elementos locales, también dispuestos, a cualquier precio, a promover tan deleznables prácticas" dentro de Cuba.
Sin embargo, tampoco en esa ocasión se informó sobre el arresto de ciudadanos cubanos vinculados al contrabando de drogas, un delito para el cual la legislación cubana prevé severas penas.
"No habrá impunidad para nadie", reiteró la CTC en su declaración, recordando que en muchos países el consumo de drogas "es ya una plaga con su secuela de violencia, corrupción y deterioro de la salud física y mental del ser humano".
No obstante, el uso de drogas es considerado un problema de salud y no está tipificado como delito en el código penal.
Cuba está ubicada en la ruta entre los principales países productores de cocaína, como Colombia, y Estados Unidos, el mayor mercado mundial.
Según las autoridades, las incursiones de los narcotraficantes internacionales en el espacio aéreo y aguas territoriales de Cuba en su tránsito hacia el norte, "provocan la presencia de grandes cantidades de drogas en el mar", principal vía de entrada al país.
La droga es lanzada desde el aire y recogida en el mar por contrabandistas que se trasladan en lanchas rápidas desde el sudoriental estado estadounidense de Florida, apenas a 170 kilómetros de territorio cubano.
Entre 1991 y noviembre de 2002, se apreció "un ascenso en el perfeccionamiento del enfrentamiento al tráfico ilegal de droga", dijo el viernes 17 el jefe de la Dirección Nacional Antidrogas del Ministerio del Interior, Jesús Becerra.
En ese periodo, añadió el funcionario, se incautaron más de 77 toneladas de drogas destinadas a "mercados del norte", de las cuales, 47 toneladas fueron confiscadas a partir de 1997.
Becerra no especificó el tipo de drogas capturadas.
En una conferencia sobre fiscalización de drogas en el Caribe, Becerra explicó que operaciones realizadas en 2002 en los aeropuertos internacionales revelaron la participación de personas de 19 nacionalidades en el trasiego de pequeñas cantidades de sustancias.
La forma más usada para el transporte en esos casos es la ingestión de los paquetes y, en menor medida, el ocultamiento en maletines, ropa y cosméticos.
"Por lo general, los narcotraficantes seleccionan a los 'correos' entre personas que afrontan una precaria situación económica y sin advertirles del peligro mortal" que corren, señaló.
Informes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señalan que el negocio del narcotráfico en el Caribe asciende a unos 3.300 millones de dólares anuales, equivalentes a 3,1 por ciento del producto interno bruto de la región.
En Cuba y República Dominicana el consumo está "muy por debajo" del promedio mundial, aunque ambos países deben continuar la inversión en recursos humanos para prevenir el fenómeno, advirtió la ONU.
