La huelga general convocada desde el lunes en Venezuela contra el gobierno de Hugo Chávez seguirá al menos un día más, anunció este miércoles la oposición, animada por la paralización parcial de la industria petrolera, aunque crece la actividad en otros sectores.
El presidente de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), Carlos Ortega, y su par de la asociación empresarial Fedecámaras, Carlos Fernández, informaron que evaluarán este jueves el resultado del paro cívico para decidir el momento de levantarlo.
El movimiento contra el presidente Chávez ha mermado al incrementarse la actividad comercial, bancaria y de transporte de pasajeros en las principales ciudades del país, admitieron los líderes de las dos asociaciones organizadoras de la huelga por tiempo indeterminado, con el apoyo de partidos de oposición.
Mientras, el ministro de Energía, Rafael Ramírez, aseguró que la producción de petróleo y de gas ha sido normal hasta ahora y que se cumplirá con los compromisos internacionales sin inconvenientes.
Esta cuarta huelga general en un año busca torcer el brazo del gobierno para que acepte un referendo consultivo sobre la permanencia de Chávez en la presidencia.
Además, la oposición trata de poner en evidencia su alegada intransigencia del gobierno ante el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, quien intenta de modo denodado una solución institucional a la crisis política venezolana.
Gaviria y representantes del estadounidense Centro Carter y del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo auspician una Mesa de Negociación entre el gobierno y la oposición, mientras la polarización política gana las calles.
El empresario Fernández y líderes de la llamada Coordinadora Democrática, que reúne a 34 partidos de oposición, encabezaron una marcha este miércoles, que finalizó con la entrega a Gaviria de una carta solicitando la aplicación para Venezuela de la Carta Democrática de la OEA ante el cierre de salidas.
La Carta Democrática, aprobada en septiembre de 2001, prevé suspender de la OEA al país miembro que se aparte del sistema democrático.
Esperamos para las próximas horas una oferta electoral por parte del gobierno, dijo Fernández, mientras que Ortega indicó que, aunque es cuesta arriba conseguir una solución, se hará el intento de reactivar la Mesa de Negociación, que no sesiona desde la semana pasada.
Las concentraciones y marchas se sucedieron desde el lunes en el marco de la huelga, jalonadas en varias ciudades del interior del país por incidentes entre partidarios del gobierno y de la oposición.
La convocatoria de la huelga, en tanto, se debilita a medida que abren sus puertas los establecimientos comerciales y las empresas privadas medianas y pequeñas comienzan a normalizarse, aunque aún es alto el ausentismo en los grandes comercios e industrias, en la educación y en los servicios de salud.
En cambio, en el sector petrolero, principal industria del país y mayoritariamente en manos del grupo estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), el conflicto prosperaba a medida que grupos de gerentes y obreros dejaban de acudir a sus turnos de trabajo.
Varios centenares de los 1.700 expendios de gasolina existentes en el país han debio cerrar por falta de combustible, y los que trabajan lo hacen de modo parcial ante largas hileras de vehículos.
Sin embrago, el Ministerio de Energía informó que dispone de combustible suficiente para abastecer la demanda de entre cinco y 13 días, según cada región.
A pesar de ese anuncio, permanecía prácticamente cerrada la refinería El Palito, ubicada a 200 kilómetros al noroeste de Caracas, con capacidad para procesar 130.000 barriles diarios de crudo y principal destilería orientada al mercado interno.
El gerente de planificación de Pdvsa y uno de los dirigentes de la huelga, Juan Fernández, señaló que 75 por ciento de las estaciones de servicio están secas, tras asegurar que el suministro de gasolina entrará en situación crítica este jueves.
Esas aseveraciones son falsas, pues es normal el abastecimiento desde buques, en los centros de llenado y para las 1.500 empresas que transportan gasolina por carretera, afirmó este miércoles el viceministro de Energía, Bernardo Alvarez.
Por su parte, el presidente de Pdvsa, Alí Rodríguez, comentó que es un crimen involucrar a la empresa en un conflicto político, pues, en la medida en que el mundo vea a los gerentes manifestando en las calles, se preguntará qué pasa y eso no es positivo para nuestra industria.
El martes, el conflicto de Venezuela y la situación de Medio Oriente provocaron el alza de los precios internacionales del petróleo.
El crudo tipo Brent aumentó 41 centavos de dólar por barril de 159 litros, para cotizarse en el mercado de Londres a 26,03 dólares, en tanto el crudo ligero estadounidense se vendió a 27,60 dólares el barril, 36 centavos más que el día anterior.
Pero este miércoles el Brent retrocedió hasta 25,49 dólares el barril y el crudo estadounidense hasta 26,92 dólares por barril, al progresar los trabajos de revisión de instalaciones de armamento iraquí por parte de los inspectores de la Organización de las Naciones Unidas.
El analista Lawrence Eagles, del grupo de corretaje londinense GNI, dijo que el mercado mantiene un ojo sobre la evolución de la situación venezolana, por si la huelga se extiende por la cadena de producción y despacho de crudo.
Venezuela, que extrae 2,8 millones de barriles diarios de crudo, es el tercer productor de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, después de Arabia Saudita e Irán.
Además, Venezuela, Canadá y México son los principales proveedores de petróleo de Estados Unidos. (FIN/IPS/hm/dm/ip/02