La fiscalía solicitará 45 años de prisión para el ex presidente de Nicaragua Arnoldo Alemán, acusado de malversar y desviar en beneficio propio, de su familia y allegados unos 100 millones de dólares del Estado.
La justicia emitirá una sentencia preliminar posiblemente antes del próximo domingo contra el actual diputado Alemán, quien fue despojado de su inmunidad parlamentaria el jueves de la semana pasada, dijeron a IPS los fiscales que entienden en el caso.
Alemán, sometido a arresto domiciliario desde hace una semana, enfrenta dos juicios por supuestos actos de corrupción durante su gobierno de 1997 a enero de este año, que se concentran en cuatro delitos penales.
En todos los casos pediremos a los tribunales la pena máxima, que son 12 años por fraude, cinco años por peculado, tres años por asociación para delinquir y 25 años por lavado de dinero, explicó a IPS Iván Lara, procurador penal de Nicaragua y encargado de llevar el juicio de lavado de dinero contra Alemán.
Sin embargo, esa petición de la fiscalía choca con una legislación en la cual se establece que ningún preso puede pasar más de 30 años en la cárcel.
El ex mandatario permanece detenido en su finca El Chile, del municipio de El Crucero, ubicada a 20 kilómetros al sur de Managua, donde es custodiado por 90 policías.
Las leyes nicaragüenses establecen que una persona sólo puede estar detenida 10 días como máximo, que para Alemán vencen el próximo domingo, antes de lo cual la justicia debe dictar sentencia preliminar o interlocutoria, es decir, de presunción de que el acusado es culpable.
Pero los jueces de las dos causas tienen también la opción de pedir una prórroga de otros 10 días, aunque en ese caso deberán dejar en libertad a Alemán.
Lara comentó que, si se concreta la sentencia interlocutoria antes del domingo, el proceso seguirá en pie y se dará paso al juicio. Además, el ex presidente tendría que seguir guardando arresto domiciliario u ordenar su traslado a una cárcel.
Con las pruebas que tenemos, hemos llegado a la conclusión de que Alemán sí fue el autor directo de lavado dinero, aseguró el fiscal.
El portavoz de la Procuraduría General, Sergio Bofelli, indicó a IPS que el lavado de dinero se materializó durante el gobierno de Alemán a través de instituciones estatales de las cuales se desviaba fondos.
Esos fondos habrían sido depositados en bancos radicados en el propio país y en Costa Rica y Estados Unidos, para luego ser girados a varias cuentas bancarias en Panamá.
Los datos que manejan los acusadores agregan que, al parecer, Alemán utilizó para esos desvíos una organización no gubernamental creada por el mismo ex mandatario y sus colaboradores para promover la democracia, llamada Fundación Democrática Nicaragüense (FDN).
En esta Navidad y fin de año no daremos tregua, pues estamos trabajando muy duro para recabar más pruebas, puntualizó Bofelli.
La jueza Gertrudis Arias está a cargo del juicio por el supuesto desvío de casi 1,4 millones de dólares, que estaban destinados al pago de publicidad en un canal de televisión estatal.
En tanto, su colega Juana Méndez sustancia la causa por la presunta malversación de 97 millones de dólares de fondos públicos, que habrían ido a parar a manos de amigos, colaboradores y familiares de Alemán.
Alemán se negó de modo reiterado tras su arresto a declarar cada vez que fue llevado ante los tribunales. Primero adujo que todavía mantenía inmunidad por su condición de diputado del Parlamento Centroamericano, alegato que fue rechazado por la justicia.
Posteriormente acusó a la jueza Arias de parcialidad, por entender que realizó declaraciones acusatorias en su contra a los medios de comunicación.
El ex mandatario, en una entrevista concedida esta semana a la cadena estadounidense de televisión Univisión, negó todos los cargos que se le imputan y dijo que es un espectáculo montado por el presidente Enrique Bolaños.
Yo solamente le he pedido (al gobierno) que me presenten una sola prueba de que Arnoldo Alemán tiene en tal banco, tal cantidad, que Arnoldo Alemán sustrajo de las arcas del Estado tal cantidad de dinero. Hubo un enorme show publicitario de los 100 millones, dijo el ex mandatario, declarando en tercera persona.
Alemán sostuvo que, cuando usó varias tarjetas de crédito para hacer compras personales en países donde estuvo de visita oficial, lo hizo porque la situación lo ameritaba. Agregó que esas visitas lograron atraer más inversión extranjera a Nicaragua.
Cuando muchas veces hago confesiones les digo a los sacerdotes (católicos) que me puedo acusar de todo pecado, menos de tres: ni ladrón ni asesino ni maricón, añadió Alemán.
Pero, analistas políticos señalaron que el trato que le ha dado a Alemán el gobierno de Bolaños ha sido muy suave para no tensar la crítica relación que mantiene con su Partido Liberal Constitucionalista (PLC).
Los dos políticos pertenecen al PLC y Bolaños ocupó la vicepresidencia del gobierno de Alemán hasta que renunció para encarar la campaña electoral que lo llevó a la presidencia en enero de este año.
Aunque el gobierno ha tratado a Alemán con guantes de seda, la situación es clara. El ex presidente es un procesado más y no tendrá salvación a menos que haya una operación de rescate antes de que lo manden a la cárcel común, destacó el ex vicepresidente nicaragüense Virgilio Godoy (1990-1997).
El panorama que afronta Nicaragua es muy saludable para la democracia, porque, en caso de que haya una sanción para Alemán, sería un ejemplo histórico en América Latina, observó. (FIN/IPS/nms/dm/ip/02