La sentencia que negó pensión por viudez a una mujer gitana en España despertó este martes la indignación de organizaciones sociales y activistas de derechos humanos.
Se está retrocediendo en la consolidación de los derechos humanos hacia la que se había avanzado en los últimos años, dijo a IPS la presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Enriqueta Chicano Jávega.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid, atendiendo a un reclamo de la administración pública, dictaminó que María Luisa Muñoz, viuda de Mariano Dual, no tiene derecho a percibir la pensión por viudez, o viudedad.
El fallo contra Muñoz, quien se casó hace 30 años bajo el rito gitano, despertó este martes una airada protesta de varias organizaciones.
Muñoz y Dual se casaron en una ceremonia gitana, formaron una familia y tuvieron seis hijos. Dual, quien falleció en diciembre de 2000, había trabajado como albañil en la misma empresa durante los 19 años anteriores, y siempre efectuó sus aportes al sistema de seguridad social.
En el registro general del organismo previsional contaba con una cartilla de beneficiario con familiares a su cargo y, junto a su cónyuge, Muñoz, compartía la titularidad del libro de familia.
Al negársele la pensión por vía administrativa, Muñoz dirigió su reclamo a la justicia. La jueza de primera instancia Francisca Arce dictaminó en junio a favor de la demandante.
Esa sentencia fue considerada histórica por algunos. En sus fundamentos señaló que en España la etnia gitana está arraigada desde tiempo inmemorial. Es sabido sobradamente que dicha etnia celebra el matrimonio conforme a ritos y costumbres que adquieren fuerza de ley entre las partes.
En el país se reconocen los casamientos celebrados por las iglesias cristianas, en cualquiera de sus ramas, por el Registro Civil y, en virtud de una reciente reforma legal, por los ayuntamientos o municipios. Además, ante éstos pueden registrarse parejas de hecho, que incluso pueden ser homosexuales en algunas regiones.
Pero ni estos antecedentes, ni el comprobado matrimonio Muñoz- Dual convencieron a los tres magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que, en una sentencia publicada el lunes, señalaron que sólo puede considerarse matrimonio aquél que es contraído de forma civil o religiosa (…) y el matrimonio gitano no participa, en la actual conformación de nuestro ordenamiento jurídico, de la naturaleza de ninguno de ellos.
Para Chicano Jávega la sentencia es absolutamente incorrecta, porque la convivencia familiar de la pareja está debidamente demostrada.
De manera similar se pronunció el presidente de la Fundación de Derechos Civiles de España, Carlos García Alvarez.
Esa sentencia es una barbaridad ya que los jueces contaron con pruebas evidentes y serias de que constituían una pareja, con seis hijos y todo ello constando en su libreta de familia, dijo García Alvarez a IPS.
Cuando (el arzobispo salvadoreño) Oscar Romero decía que la justicia es como la serpiente: sólo pica a los que van descalzos, también hablaba de María Luisa Muñoz, una gitana viuda a la que no le han dejado ni para zapatos, comentó el periodista del diario El Mundo, Pedro Simón.
Muñoz vive en un vecindario marginal de Madrid, Pan Bendito, y gana su sustento vendiendo flores en la calle. La solidaridad se hizo notar, y sus vecinos la alientan para que no se rinda. Ella aprieta los labios, no habla y sigue adelante.
La Fundación Secretariado General Gitano se hará cargo de la defensa legal de Muñoz, ya que la sentencia del tribunal madrileño será apelada ante el Tribunal Supremo de Justicia.
Según Chicano Jávega, además de ayudarla, hay que intentar que la ley sea interpretada de acuerdo a los nuevos tiempos y si fuera necesario modificarla, para que esto no vuelva a ocurrir.
Hay que destacar en este caso el mal funcionamiento de la administración pública, ya que no tenía que haber negado el pago de la pensión, ni recurrir ante la justicia y mucho menos entrar en competencias religiosas con una institución milenaria, como es la gitana, añadió García Alvarez. (FIN/IPS/af/dcl/hd/02