AMBIENTE-FRANCIA: Combustible del Prestige se acerca a la costa

Las autoridades de Francia toman medidas para impedir que llegue a su costa atlántica el derrame de combustible del buque tanque Prestige, hundido hace dos semanas frente a la noroccidental región autónoma española de Galicia.

El combustible fuel liberado por las fisuras del Prestige podrían alcanzar la costa francesa el próximo martes o el miércoles, advirtió el Ministerio de Ambiente.

Diez botes desplegaron 200 metros de rastras (redes especiales con plomadas para alcanzar el fondo del mar) con el objetivo de mantener el fuel lejos de los centros turísticos de Saint Jean-de- Luz y de Biarritz, cerca de la frontera con España.

El Prestige, un buque tanque monocasco de 26 años de antigüedad, se hundió el 19 de noviembre con 77.000 toneladas de fuel a 270 kilómetros de la costa noroccidental de España.

Unas 200 manchas de combustible, algunas de varios cientos de metros cuadrados, se encontraban a 150 kilómetros de la costa de Francia este viernes.

Las autoridades asignaron al submarino Nautile la misión de controlar los restos del naufragio del Prestige. Fotografías tomadas por el submarino muestran que el combustible aún se escapa por las fisuras del tanque.

”Empujadas por el viento, las manchas avanzan a 30 kilómetros por día, una velocidad relativamente alta, hacia la costa francesa”, dijo este viernes el portavoz de la prefectura de Brest, en la región de Bretaña, Sylvain Le Berre.

”El riesgo de que el combustible llegue a la costa francesa es real. Hasta ahora hemos visto pequeñas manchas aisladas, pero más fuel está saliendo del Prestige y queremos estar preparados para impedir grandes daños”, dijo el secretario de Transporte Marítimo del gobierno francés, Dominique Bussereau.

El combustible cargado por el buque no se solidifica a la temperatura dos grados que se soporta en las profundidades donde está hundido, dijo el investigador François Merlin, del Centro Francés de Documentación e Investigación sobre Contaminación Accidental Marítima.

”La consistencia del fuel es como la de la miel, pero aun así es líquido. Por otra parte, este combustible es menos denso que el agua marina, lo que significa que, en caso de escapes, flotará, naturalmente”, dijo Merlin.

Los buques carguero monocasco están siendo sustituidos en todo el mundo por razones de seguridad por embarcaciones de doble casco, de acuerdo con las convenciones internacionales de seguridad marítima.

La marina de guerra francesa envió a comienzos de esta semana, como medida adicional de precaución, un buque con equipos de bombeo a Cherbourg, en el norte de Bordeaux.

Las autoridades podrían ordenar dentro de 24 horas el regreso a aguas francesas de otros barcos similares que ahora operan en la costa española, dijo Bussereau. El gobierno francés también ordenó a la armada y a los bomberos estar alerta para actuar en caso deque las manchas de fuel lleguen a este país.

Por otra parte, las autoridades prohibieron el ingreso a aguas territoriales de todo buque tanque monocasco de más de 15 años de antigüedad. Una de esas embarcaciones fue expulsada del mar francés la semana pasada.

Francia también obligó al gobierno de Estonia a inspeccionar un buque tanque monocasco de 26 años, el Byzantium, cuyo ingreso en aguas territoriales francesas estaba previsto para comienzos de la semana próxima con 50.000 toneladas de petróleo encargadas por Crown Resources, la misma firma que contrató el Prestige.

Pero organizaciones ambientalistas afirman que Francia no fue rigurosa en sus medidas de control de la contaminación marítima. Muchas de las medidas anunciadas ahora por el gobierno son obligatorias, según las convenciones internacionales, sostuvo el director de Greenpeace Francia, Thierry Rebelle.

La gubernamental Agencia Internacional de Control Marítimo comenzará a funcionar en enero y Francia fue el último país europeo que designó a su representante ante el organismo, dijo Rebelle.

El activista advirtió que Francia inspeccionó en los últimos 20 años apenas 10 por ciento de las embarcaciones que ingresaban en sus puertos, cuando el mínimo establecido por las convenciones internacionales es de 25 por ciento.

El año pasado, Francia inspeccionó 558 barcos, mientras Gran Bretaña controló 1.801, Bélgica, 1.679 y Grecia, 751, añadió. Este país fue citado por la Corte Europea de Justicia por no respetar sus obligaciones internacionales. (FIN/IPS/tra-eng/

Pero la amenaza que se cierne sobre la costa francesa no es tan grave como los perjuicios reales que ya sufre la costa española, o como los sufridos en Francia por los derrames del buque petrolero Erika hace tres años.

Erika cargaba 20.000 toneladas de petróleo cuando se hundió en la costa atlántica francesa en 1999. La mancha negra contaminó 500 kilómetros de costa entre las localidades de Brest y La Rochelle, lo cual ocasionó la muerte de miles de aves marinas y destruyó bancos de peces y de ostras.

El daño en las playas paralizó la actividad turística durante meses. (FIN/IPS/tra-eng/jg/ss/mj/en/02

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe