El cantautor Polo Montañez murió en la capital cubana tras días de agonía por las heridas sufridas en un accidente de tránsito, una verdadera epidemia que cobra miles de vidas cada año en las calles y carreteras de este país.
Montañez falleció casi a la medianoche del martes, seis días después de estrellarse con su automóvil contra el remolque de un camión que se encontraba detenido en medio de la oscuridad de la noche en la autopista nacional, que comunica a La Habana con la occidental Pinar del Río, provincia natal del músico.
El accidente ocurrió cuando Montañez, de 47 años y cuyo verdadero nombre era Fernando Borrego, regresaba junto a cinco personas a su lugar de residencia en San Cristóbal, localidad ubicada a unos 60 kilómetros de la capital de Cuba, luego de una celebración familiar, según revelaron fuentes oficiales.
Aunque los medios de comunicación oficiales no dieron detalles sobre las causas del choque, versiones que circularon en los días posteriores asociaron el accidente automovilístico con la posible ingestión de bebidas alcohólicas por parte del cantautor.
También se presume que el conductor del camión tenía las luces apagadas en ese momento y que no había colocado las señales de advertencias establecidas por la ley para los casos en que un vehículo es detenido en la ruta. A ello se agrega, por supuesto, la ausencia total de alumbrado en esa autopista.
Fuentes oficiales cubanas reconocieron desde 2000 que una verdadera epidemia de accidentes de tránsito se había desatado en la isla, con niveles cercanos a los que se reportan en países industrializados.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) coloca a Cuba junto a Estados Unidos, Venezuela, Colombia, República Dominicana, Panamá y Puerto Rico, como el grupo de países de América con mayor cantidad de muertes por accidentes de tránsito.
Los fallecidos por ese motivo en el mundo en 1998 fueron casi 1,2 millones de personas. La OMS advierte que para 2020 ese tipo de accidentes se convertirán en la tercera causa de muerte en el mundo, en gran medida por su aumento en los países del Norte.
En Cuba ocurren cada 24 horas un promedio de 31,1 colisiones en la vía pública y por esa causa mueren tres personas y se lesionan una media diaria de 23,1, según datos del año pasado divulgados por el capitán Eduardo Creach, de la Policía Nacional Revolucionaria.
Los accidentes constituyen la quinta causa de muerte en este país con 11,2 millones de habitantes, según el Anuario Estadístico que edita el Ministerio de Salud. Alrededor de 50 por ciento de esos accidentes son de tránsito.
Sólo en 2000 fallecieron por accidentes de transporte, incluidos aquellos que involucraron bicicletas, 1.636 hombres y 413 mujeres.
Datos dados a conocer en la Semana Nacional de Tránsito, realizada del 17 al 23 de este mes, indican que 30.000 personas perdieron la vida en los últimos 26 años por accidente de tránsito y otras 300.000 quedaron lesionadas por ese motivo.
Mientras, una investigación del gubernamental Instituto de Medicina Legal confirmó que en los últimos 10 años una de cada tres personas fallecidas por accidentes del tránsito había ingerido bebidas alcohólicas poco antes de su muerte.
Además, más de la tercera parte de las personas que murieron en accidentes en el lapso estudiado conducían un vehículo y alrededor de 44 por ciento eran peatones, añade el estudio citado por la prensa cubana.
Las autoridades señalan que entre las principales causas y violaciones que provocan los accidentes de tránsito en Cuba se cuentan el no atender debidamente al control y dirección del vehículo, no respetar el derecho de vía, exceso de velocidad, ingestión de bebidas alcohólicas y las imprudencias de peatones y ciclistas.
Asimismo, inciden en este drama el mal estado de algunos vehículos privados y de transporte público de pasajeros, las vías con severos deterioros y la ausencia total o parcial de señalizaciones de tránsito en algunas carreteras del país, incluidos tramos de la autopista nacional.
Es una lástima. Se fue tan pronto como llegó, dijo Evelio Díaz, un bibliotecario que como tantas otras personas en Cuba vivió los últimos días pendiente de los partes médicos sobre el estado de salud del cantautor.
Montañez apenas era conocido en Cuba hace tres años, cuando firmó un contrato con la casa discográfica europea Lusáfrica- Recsa. Su primer disco, titulado Guajiro natural, vendió más de 60.000 copias en Colombia y lo lanzó definitivamente a la fama.
La muerte se interpuso en medio de una meteórica carrera artística, justo en momentos en que Montañez se disponía a reeditar con Guitarra mía el enorme éxito cosechado en la misma Cuba, Colombia, México y otros países latinoamericanos con su primer disco, afirmó el periodista Pedro de la Hoz.
José Ramón Cuevas, uno de los más importantes activistas en favor del ambiente en Cuba, también murió a causa de un accidente de tránsito el año pasado.
Cuevas, quien presidía la organización no gubernamental Pro Naturaleza y era conductor del popular programa de televisión Entorno, falleció en un accidente provocado cuando el conductor del automóvil en el que viajaba violó la señal de pare previa a una línea férrea. (FIN/IPS/da/dm/he cr/02
