Activistas contrarios al Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA) concertaron en La Habana una campaña regional para combatir el plan de integración comercial, que incluirá una jornada continental de protesta en septiembre de 2003.
Luchar contra el ALCA es luchar contra la anexión y la miseria, sostuvo una declaración firmada por casi 1.000 delegados de los países de América, en el II Encuentro Hemisférico en rechazo al acuerdo comercial impulsado por Estados Unidos, y que negocian 34 naciones de la región, excepto Cuba.
El plan de acción acordado incluye la realización simultánea en cada país de marchas, huelgas, cortes de rutas, concentraciones y otras formas de protesta ciudadana el 10 de septiembre del año próximo.
Para esa fecha está prevista la Quinta Reunión de Ministros de la Organización Mundial del Comercio (OMC), en el oriental balneario mexicano de Cancún, considerada como la madre nutricia del ALCA por los activistas reunidos en Cuba.
El movimiento contrario al ALCA prevé efectuar consultas populares o plebiscitos sobre el acuerdo, fortalecer mecanismos de difusión y desenmascarar la articulación entre deuda externa, militarización y libre comercio.
Asimismo, la estrategia trazada por los activistas incluye la incorporación de la temática en los debates de los parlamentos nacionales y fiscalizar, en la medida de lo posible, presuntas negociaciones secretas del ALCA, la OMC y otros proyectos considerados peligrosos para los pueblos.
Según el cronograma impulsado por Estados Unidos, el ALCA deberá entrar en vigor en enero de 2005, aunque varios países latinoamericanos consideran poco probable que se cumplan esos plazos debido a las diferencias aún sin resolver.
En el encuentro de cuatro días concluido el jueves participaron representantes de organizaciones sociales y políticas, sindicalistas, campesinos, indígenas, religiosos, ambientalistas, defensores de derechos humanos, comunicadores, parlamentarios, artistas e intelectuales de la región.
Los delegados, que forman parte del movimiento internacional contrario al actual proceso de globalización de la economía, acordaron promover la asistencia masiva al Foro Social Mundial que se llevará a cabo en la meridional ciudad brasileña de Porto Alegre, entre el 23 y el 28 de enero.
El único país excluido del proyecto de integración comercial estadounidense es Cuba, cuyo gobierno ve con reservas de todo tipo un proceso en su opinión diseñado para devorar las economías nacionales y beneficiar exclusivamente a Estados Unidos.
No tenemos interés o deseo alguno de recibir la distinción de ser anexados a Estados Unidos, sostuvo Osvaldo Martínez, director del gubernamental Centro de Investigaciones de la Economía Mundial, al abrir los debates.
Martínez aseveró que el verdadero interés de Washington es penetrar los mercados latinoamericanos, arrasando con los productores nacionales para compensar su gigantesco y creciente déficit comercial, que en 2001 llegó a 346.000 millones de dólares.
Parte de las sesiones contaron con la asistencia del presidente de Cuba, Fidel Castro, quien consideró que el movimiento de rechazo al ALCA muestra un mayor grado de conciencia que hace un año, cuando La Habana fue sede del primer encuentro de esta naturaleza.
Castro, quien viajó a Quito para asistir este viernes a la inauguración de la Capilla del Hombre, un proyecto artístico del desaparecido pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín, exhortó a los activistas a no ignorar a los partidos políticos de izquierda en su lucha contra el ALCA.
Es muy importante unir. Hay que unir a todos los que puedan hacer un aporte en esa batalla, sostuvo el mandatario, que recomendó también incorporar a la campaña a los pequeños y medianos empresarios.
Según algunos analistas, el movimiento contrario al plan de integración comercial hemisférica se ha consolidado en el último año. Hay un nivel mayor de lucidez de las propuestas, más consenso en cuanto a qué hacer, comentó a IPS el sociólogo cubano Aurelio Alonso.
El texto de la declaración final del encuentro destaca que en el año transcurrido desde la primera reunión se fortaleció la resistencia contra el ALCA.
En el primer encuentro todo eran diagnósticos y explicaciones de qué es el ALCA. Ahora, lo más importante y sustantivo es el plan de acción, dijo a su vez la investigadora social Isabel Raubber, de Argentina. (FIN/IPS/pg/dcl/if/dv/02