DERECHOS HUMANOS: ONU profundiza estudio sobre terrorismo

Un organismo de derechos humanos de la ONU recomendó la profundización de los estudios sobre el terrorismo para enfrentarlo con métodos más racionales.

La Subcomisión de Protección y Promoción de los Derechos Humanos de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) encomendó a la relatora especial sobre terrorismo, la griega Kalliopi Koufa, que prosiga las investigaciones que inició en 1996.

El terrorismo debe ser combatido en el contexto del derecho, pues la dura experiencia de América Latina demuestra que lo peor es enfrentar al terrorismo con métodos terroristas, apuntó el chileno José Bengoa, uno de los 26 expertos independientes que integran ese organismo a propuesta de los gobiernos.

Otro experto de la Subcomisión, Yozo Yokota, de Japón, reclamó un balance entre los dos enfoques del tema, el de seguridad y el de derechos humanos. Es inaceptable que los derechos humanos sean violados en nombre de la seguridad, argumentó.

La Subcomisión debatió en su periodo de sesiones de 2002, que finaliza esta semana, la cuestión del terrorismo desde el ángulo tradicional de los derechos humanos, con énfasis en las causas y en otras características del fenómeno.

Además, por primera vez se ocupó del fenómeno del terrorismo en relación con los efectos sobre los derechos humanos de las disposiciones adoptadas en los últimos tiempos para contrarrestarlo.

En los dos debates y en ambas resoluciones aprobadas los 26 expertos de la Subcomisión condenaron de manera inequívoca todos los actos terroristas y, en especial, los cometidos el 11 de septiembre en Estados Unidos.

Sin embargo, el organismo de la ONU sostuvo que todas las medidas antiterroristas deben adaptarse de manera estricta al derecho internacional, y en especial a las normas y obligaciones de la esfera de los derechos humanos.

En su segunda resolución, la Subcomisión alertó sobre la incompatibilidad de algunas leyes, reglamentaciones y prácticas adoptadas por numerosos países.

Esas disposiciones cuestionan las garantías judiciales inherentes al estado de derecho, especialmente en relación con las detenciones arbitrarias, las incomunicaciones, el derecho a la defensa y a la apelación, agrega.

La Subcomisión, un organismo subsidiario de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, denunció las medidas que constituyen actos de tortura o castigos crueles, inhumanos y degradantes, cometidos en violación de normas que no admiten derogación.

Los expertos lamentan las graves violaciones de otras libertades fundamentales, como la libertad de expresión y el respeto a la vida privada, la libertad de movimiento, y también las restricciones a la inmigración y al derecho de asilo.

El cuerpo manifestó que, con frecuencia, esas violaciones van acompañadas de discriminaciones vinculadas a la nacionalidad, el origen étnico y la religión.

En el debate del informe de Koufa surgieron algunas divergencias entre los miembros de la Subcomisión, que proceden de países de todos las regiones.

Emmanuel Decaux, de Francia, opinó que al referirse a las causas del terrorismo no basta con atribuirlo a la pobreza, pues también ”tiene otros orígenes”.

Sobre la definición del terrorismo, un aspecto en el que la ONU no ha logrado todavía concertar una fórmula de consenso, Decaux subrayó que debe ser definido por actos, como la violación del derecho a la vida.

El Hadji Guissé, de Senegal, estimó que el experto Decaux pretendía postergar en forma indefinida la investigación sobre los orígenes del fenómeno.

No se puede estudiar las formas de combatir al terrorismo ”partiendo de la nada y sin tomar en cuenta sus raíces”, dijo Guissé.

Koufa mencionó en su informe que varios estados y tratadistas insisten en que, puesto que el terrorismo no tiene ninguna justificación, no vale la pena tratar de comprender sus motivos.

Las mismas fuentes sostienen, en cambio, que hacen falta todavía medidas más enérgicas contra los terroristas y los grupos terroristas con el fin de eliminarlos.

Esa posición causa consternación en la mayoría, que considera insensato prescindir del examen de las causas fundamentales del terrorismo, dado que, en algunas situaciones, están relacionadas con violaciones de los derechos humanos, puntualizó la experta griega.

La relatora especial comparte la idea de estudiar las causas fundamentales a fin de idear más racionalmente los medios para eliminar al terrorismo. (FIN/IPS/pc/dm/hd/02

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