ECONOMIA-CUBA: Reducir burocracia para atraer inversiones

El gobierno de Cuba se propone aliviar la burocracia en materia de radicación de capitales extranjeros, que entorpece procesos en marcha y ha sido criticada por inversionistas.

El viceministro para las Inversiones Extranjeras, Ernesto Senti, aseguró que se está ”dando una batalla” para abreviar los plazos de negociación y aprobación del ingreso de capitales foráneos en Cuba.

”Si el gobierno aprueba un negocio, tiene que ser para que funcione lo antes posible y rinda los frutos para todos los socios”, dijo Senti en el congreso de sideromecánica de La Habana, que finaliza este viernes.

Las declaraciones del funcionario coinciden con la publicación en medios internacionales de prensa de supuestas quejas al respecto de la Unión Europea (UE), de donde proceden las principales inversiones en la isla.

Versiones periodísticas indicaron que la UE hizo llegar al gobierno de Fidel Castro un documento de 15 páginas, donde se señalan numerosos obstáculos para el desarrollo de sus negocios en Cuba.

Senti explicó que se creó el sistema de ventanilla única, de manera que el interesado tenga que acudir a un solo lugar, con el fin de agilizar la instalación de empresas extranjeras, una vez aprobado el proyecto de inversión.

Los trámites incluyen el registro mercantil, impacto ambiental, aranceles, permisos migratorios y laborales, licencias varias, apertura de cuentas bancarias e inscripción y actualización ante la aduana general, entre muchos otros trámites.

Gestionar todo eso dura ”casi un año” y el uso de la ventanilla única es voluntario y gratuito, pues ”no queremos recargar costos…”, apuntó Senti, para quien las tarifas que pagan los inversionistas ya son suficientes.

Así mismo, consideró posible eximir de impuestos por un periodo de tiempo que permita la rápida recuperación de la inversión, aunque siempre de forma puntual y partiendo del estudio de factibilidad.

El viceministro para las Inversiones Extranjeras informó que hasta la fecha existen en Cuba 412 asociaciones con capital extranjero, procedentes de 46 países, 54 por ciento de los cuales son miembros de la UE.

Tomando en cuenta el volumen de las inversiones por naciones, las principales por su orden son España, Canadá, Italia, Francia, México y Gran Bretaña. Por su parte, China y Alemania han incrementado su presencia en la isla, según el funcionario.

En cuanto a modalidades de inversión, a las empresas mixtas y contratos de asociación se añadieron en los últimos tiempos los contratos de producción o servicios cooperados y los de administración.

”La participación (que puede ser hasta 100 por ciento foránea) es negociable. Estamos buscando un balance”, comentó Senti, quien mencionó el turismo, la energía, la biotecnología y derivados del azúcar como sectores prioritarios de inversión.

El Banco Central de Cuba señaló en su informe económico de 2001 que la inversión extranjera desempeñó un papel complementario para el desarrollo del país, al aportar ”capital, tecnología o mercados”.

”Esta actividad ha generado un efecto multiplicador en el resto de los sectores de la economía, al estimular la competitividad, la eficiencia y la aplicación de tecnologías de avanzada en las empresas nacionales”, apuntó esa entidad.

Otros reportes oficiales agregaron que el balance del año pasado cerró con 400 asociaciones económicas internacionales, 72 de las cuales funcionan fuera de Cuba, que en total aportaron alrededor de 200 millones de dólares en ese periodo.

En 2001 se concertaron 24 nuevos negocios de inversión con capital extranjero, de los cuales 13 operan en el exterior y se ubican fundamentalmente en la construcción, la biotecnología y en la industria farmacéutica.

En el marco jurídico internacional, el gobierno cubano suscribió hasta el momento 62 acuerdos bilaterales de promoción y protección recíproca de inversiones y siete para la eliminación de doble gravamen.

Sin embargo, la UE pidió ”mayor seguridad jurídica y un marco legal confiable y transparente” para sus inversiones en la isla, según una versión periodística del informe, que habría sido entregado al gobierno de Castro varias semanas atrás.

”La aplicación práctica de algunos aspectos de la legislación económica no es uniforme y resulta en ventajas a algunas firmas en detrimento de otras”, se quejaron los inversionistas comunitarios.

También criticaron lo que calificaron de ”exceso de controles e inspecciones”, que ”puede resultar en un intervencionismo exasperante, y requiere de la actividad empresarial un esfuerzo orientado más a cumplir con aspectos formales de las regulaciones vigentes que a producir eficientemente”.

La UE consideró que el sistema de impuestos necesita ser modernizado para hacerlo ”más transparente, justo y eficiente, con vistas a promover las inversiones extranjeras, particularmente en actividades relacionadas con la exportación”.

En la actualidad, prácticamente todos los sectores de la economía están abiertos al capital foráneo, excepto la defensa, los servicios a la población en salud y educación y el comercio minorista.

Sin embargo, actividades que se relacionan con esos sectores sí pueden ser susceptibles de asociación con capital extranjero.

Las inversiones extranjeras en Cuba, que comenzaron en 1988 en el turismo, están protegidas por la Constitución y la ley 77 de 1995, así como por el decreto ley 195 sobre zonas francas promulgado en 1996. (FIN/IPS/pg/dm/if/02

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