AMBIENTE-RUSIA: Se derrumba la vida en las ciudades

El derrumbe parcial de una tienda de nueve pisos en la noroccidental ciudad de San Petersburgo es un síntoma del colapso de la infraestructura y la calidad de vida de los centros urbanos de Rusia.

El accidente en que murieron cuatro personas fue consecuencia de defectos de diseño y construcción, dijo el ministro de Situaciones de Emergencia, Sergei Shoigu.

Problemas similares se reiteran en 1.000 ciudades grandes y al menos 2.000 pequeñas, donde residen 100 de los 142 millones de habitantes. Unas 20.000 personas mueren por año debido a la grave contaminación urbana, según las autoridades.

Los edificios ruinosos y la infraestructura al borde del colapso son los fenómenos más graves y urgentes que afronta el desarrollo urbano, dijo el primer ministro Mikhail Kasyanov en un encuentro sobre la materia celebrado el miércoles 5, el mismo día del derrumbe.

Kasyanov propuso reformas municipales y nuevos mecanismos de préstamos hipotecarios para mejorar la construcción, pero éste es sólo una parte del problema.

La delincuencia, la contaminación y la pobreza afectan gravemente la vida en las ciudades rusas, dijo el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Kofi Annan, en la misma conferencia.

Esas dificultades no pueden resolverse sin gobernancia, agregó Annan.

El presidente Vladimir Putin dispuso nuevas medidas para mejorar el suministro de electricidad y calefacción en aldeas y ciudades.

Los cortes de electricidad y las continuas fallas en los sistemas de calefacción se convirtieron en un calvario para los habitantes de las ciudades durante el último invierno boreal.

Los desperfectos más graves se registran en la calefacción central instalada en los edificios de viviendas durante la era soviética.

Apenas una pequeña falla en las tuberías de agua caliente basta para que se corte el servicio. Este tipo de calefacción central requiere el bombeo continuo de grandes cantidades de agua por largos recorridos, consume mucha energía y su mantenimiento es costoso.

El servicio era casi totalmente subsidiado en la Unión Soviética, disuelta en 1991. Pero ahora son muchos los que no pueden pagar las cuentas, y no hay inversiones para reemplazar los obsoletos sistemas por alternativas sustentables y eficientes.

El Kremlin anunció este año un préstamo de 85 millones de dólares del Banco Mundial para modernizar la calefacción. Pero las ciudades rusas necesitan mucho más.

Pocos pueden aprovechar los préstamos hipotecarios para construir viviendas nuevas. Los bienes inmobiliarios son demasiado costosos para la mayoría de la población.

Los expertos advierten que muchos de los bloques de apartamentos de la era soviética se están volviendo inhabitables, y ante la imposibilidad de pagar por una vivienda digna, muchos de sus residentes podrían terminar viviendo en asentamientos precarios.

Los municipios carecen de recursos para desarrollar la infraestructura urbana, sostuvo el gobernador de la central región de Samara, Konstantin Titov.

”En los años 60 y 70, la Unión Soviética mantuvo un alto ritmo de construcciones urbanas. Pero ahora las regiones no tienen dinero ni siquiera para demoler las estructuras ruinosas”, afirmó Titov.

El ambiente urbano también se deteriora. La calidad del aire y el agua es mala en muchas ciudades, según expertos.

En más de 30 ciudades y aldeas, la contaminación es cinco veces superiores a los límites permitidos, dijo el subdirector del Servicio Federal de Control Ambiental, Yuri Tsaturov.

Los centros urbanos de las áreas industriales de los meridionales Urales y en Siberia occidental, como Magnitogorsk, Novokuznetsk, Omsk, Khabarovsk y Yekaterinburg, son los más contaminados del país. La contaminación es causa indirecta de 20.000 muertes anuales, sostuvo Tsaturov.(FIN/IPS/tra- eng/sb/ss/dcl/en/dv/02

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe