Los mandatarios reunidos en la segunda Cumbre de Europa, América Latina y el Caribe expresaron este viernes una amplia condena del terrorismo en las dos regiones, pero un foro alternativo se opuso a calificar de terroristas a las guerrillas colombianas.
El presidente del gobierno español y de turno de la Unión Europea (UE), José María Aznar, dijo al inaugurar la Cumbre que el terrorismo es la amenaza más importante y directa a nuestro sistema compartido de valores.
El terrorismo, añadió, atenta contra nuestras libertades básicas, contra los derechos de las personas, quiere quebrar nuestras democracias y poner en peligro la paz y la estabilidad internacional.
A continuación de Aznar habló el presidente del Brasil, Fernando Henrique Cardoso, quien señaló que la lucha contra el terrorismo se decantó como una de las prioridades fundamentales de nuestro tiempo.
Aunque en su intervención no lo mencionó expresamente, es conocido que la principal preocupación del jefe del gobierno español es el grupo ETA, que ha sido incorporado por la UE a su lista de organizaciones terroristas. Todos los mandatarios presentes, sin excepción, apoyaron esa definición.
Las diferencias aparecieron en el caso colombiano. La delegación de Cuba consignó que no coincide, al menos totalmente, con aplicar la calificación de terroristas a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y al Ejército de Liberación Nacional (ELN), a las que sigue considerando organizaciones guerrilleras.
Pero el presidente de Colombia, Andrés Pastrana, reclamó que la UE incluyera a las FARC y al ELN en su lista de organizaciones terroristas, como lo ha hecho con las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Si masacrar a 119 personas (la semana pasada en la localidad de Bojayá, cercana a la frontera con Panamá) no es un acto terrorista, si dinamitar a un niño de 14 años y luego empaquetarlo con papel de regalo, tampoco lo es, ¿qué es lo que se considera acto terrorista, se preguntó Pastrana en una conferencia en el Club Siglo XXI, de Madrid.
El mismo se respondió. Quienes cometen actos terroristas tienen que ser calificados de terroristas, afirmó el presidente colombiano. Aznar coincidió con Pastrana, al mostrarse firme partidario de incluir a las FARC en la lista de la UE de grupos terroristas porque, dijo, eso es lo que son, grupos que realizan actividades intolerables.
Francia y Suecia se oponen a esa petición, por considerar que si se considera terroristas a las FARC, no podría volver a haber negociaciones con esa organización en el futuro.
Pastrana replicó que igual se podría negociar y recordó que en España se negoció con ETA, así como Gran Bretaña lo hizo con el IRA (Ejército Republicano Irlandés), dos grupos a los que los respectivos gobiernos consideran terroristas.
Por otro lado, en entrevista a solas, Aznar solicitó al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que se comprometa claramente contra el terrorismo y que controle con eficacia a los etarras afincados en su país.
Según fuentes venezolanas, Chávez contestó en privado como lo viene haciendo en público: los etarras están controlados y la decisión de acceder o no al pedido de extradición de los mismos corresponde al Poder Judicial, en cuyas manos se encuentra la solicitud.
Mientras, el Foro Social Trasatlántico (FST), que funciona de manera crítica y paralela a la Cumbre América Latina-UE, mantiene una posición diferente a la de los gobernantes ante la cuestión del terrorismo.
En el FST participa una delegación de Batasuna, el partido vasco que apoya y es apoyado por ETA y cuya ilegalización procuran el gobierno de Aznar y la principal fuerza de oposición, el Partido Socialista Obrero Español.
También forman parte del Foro organizaciones que defienden a las FARC y al ELN, como la colombiana Plataforma por la Paz en la Amazonia.
En Colombia hay una guerra entre una insurgencia de gran tamaño y un gobierno represor, violador de los derechos humanos, que actúa junto con grupos paramilitares y que es mantenido y manejado por el gobierno gringo (estadounidense) con la complicidad de las empresas transnacionales, se lee en un documento de la Plataforma.
La organización no gubernamental internacional Human Rights Watch urgió a la UE a continuar presionando al gobierno colombiano para reprimir a los grupos paramilitares y a las para que respeten las leyes humanitarias internacionales. (FIN/IPS/td/ff/ip/02
