La invasión israelí de los territorios palestinos y un posible ataque de Estados Unidos contra Iraq mantienen al alza los precios internacionales del petróleo, que este viernes se cotizaron alrededor de 11 por ciento más que el promedio de marzo.
El Ministerio de Energía de Venezuela confirmó que la cesta de siete crudos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se cerró la semana a 25,15 dólares por cada barril de 159 litros, mientras que en marzo se vendió a 22,46 dólares en promedio.
En tanto, el petróleo estadounidense West Texas Intermediate se cotizó este viernes a 26,98 dólares, 2,7 dólares más que la media de marzo, y el británico Brent el Mar del Norte también creció en el orden de 11 por ciento para ubicarse a 26,32 dólares el barril.
El mercado petrolero recuperó así por primera vez el nivel que tenía antes de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos.
Analistas entienden que esta tendencia alcista, que se evidenció con más fuerzas en los últimos días de marzo y a comienzos de abril, responde a la agudización del conflicto palestino-israelí y las repercusiones que podría tener en los países árabes, principales exportadores de crudo.
Además, aún persiste la posibilidad de que Estados Unidos ataque a Iraq, en el marco de la lucha antiterrorista implementada por Washington en respuesta a los atentados del 11 de septiembre contra el Word Trade Center de Nueva York y de la sede del Pentágono, en Washington, cuyo primer capítulo fue Afganistán.
Iraq es miembro de la OPEP, pero su producción no se contabiliza dentro del total de los 11 países del grupo debido al embargo aprobado en su contra por la Organización de las Naciones Unidas desde que invadiera a Kuwait en 1990, que desencadenó la guerra del Golfo en 1991.
Pero los precios del petróleo comenzaron a crecer a mediados de marzo, aunque en forma moderada, tras la decisión de la OPEP y de otros países productores ajenos al grupo, como Rusia, Noruega, Angola, México y Omán, de no incrementar la oferta, una medida que entró en vigor el 1 de enero.
El secretario general de la OPEP, el ex ministro venezolano de Energía Alí Rodríguez, negó que la organización vaya a colocar más petróleo en el mercado, al menos de inmediato, para tratar de abatir los precios.
Rodríguez señaló que el conflicto en el Medio Oriente hasta ahora sólo ha tenido un efecto especulativo en el mercado, pues no se ha visto perjudicado el suministro y tampoco hay mayor demanda.
Explicó que el grupo no se niega a estudiar un aumento de la demanda, pero aclaró que una decisión en ese sentido sólo se tomará si hay crecimiento de la demanda, si el mercado necesita más petróleo.
La OPEP cubre en la actualidad un poco más de un tercio de la demanda mundial de crudo, que es de 76 millones de barriles diarios.
El grupo calcula que en 2010 el mundo necesitará 89 millones de barriles por día y una década después alrededor de 106 millones.
Mientras, analistas financieros y del mercado de materias primas de Nueva York y Londres siguen con atención lo que ocurre entre Israel y Palestina, así como el papel que desarrolla Estados Unidos en ese conflicto y en su actitud hacia Iraq.
El presidente estadounidense, George W. Bush, pidió el jueves a Israel que retire las tropas de las áreas controladas por la Autoridad Nacional Palestina y dispuso que la semana próxima viaje a la región su secretario de Estado, Colin Powell. Dos acciones que contribuyeron a calmar al mercado de crudo.
Sin embargo, desde que finalizaron las operciones militares estadounidenses en Afganistán, persiste el temor de que Washington le declare algún tipo de acción bélica a Bagdad, cuyo régimen resistió la guerra del Golfo.
Otro elemento que puede perturbar al mercado fue el llamado a los productores árabes de petróleo del líder espiritual de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, de decretar un embargo simbólico de un mes contra los países occidentales, como medio de presión para que dejen de apoyar a Israel.
Pero esa opción, mencionada por Jamenei en un sermón este viernes, no representa la posición oficial de Irán, un importante productor de crudo y miembro de la OPEP, y fue rechazada de inmediato por otros países socios del grupo, como Arabia Saudita y Kuwait.
En lo que a la OPEP se refiere, un embargo no es concebible, porque nadie en su sano juicio apoyaría una medida de ese tipo, que se volvería con toda certeza contra nosotros, apuntó un portavoz de la OPEP. (FIN/IPS/ac/dm/if/02