La Cámara de Diputados de Chile estará presidida por primera vez por una mujer, según un acuerdo político aprobado este miércoles por la gobernante Concertación por la Democracia.
La coalición de cuatro partidos de centroizquierda postuló a la diputada Adriana Muñoz, del Partido Por la Democracia, para que presida la cámara baja surgida de los comicios legislativos de diciembre, que se instalará este lunes en la sede del Congreso en Valparaíso, 120 kilómetros al oeste de Santiago.
Muñoz ejercerá la presidencia por un año y el 11 de marzo de 2003 asumirá el cargo, también por 12 meses, la diputada Isabel Allende, del Partido Socialista, hija del presidente Salvador Allende, derrocado por un cruento golpe militar el 11 de septiembre de 1973.
El Partido Demócrata Cristiano, miembro también de la coalición oficialista, designará a la máxima autoridad de los diputados en los dos años siguientes, para completar así el periodo de cuatro años de ejercicio de los 120 parlamentarios que prestarán juramento este lunes.
La Concertación por la Democracia redujo su presencia en la cámara baja de 70 a 63 diputados en los comicios de diciembre, no obstante lo cual mantuvo la mayoría absoluta que le permite controlar la dirección de ese cuerpo legislativo.
Muñoz señaló que se ofrecerá a la opositora y derechista Alianza por Chile la segunda vicepresidencia de la cámara, en tanto la primera vicepresidencia podría corresponder al Partido Radical Socialdemócrata, cuarto integrante de la coalición gobernante.
La designación de una parlamentaria para presidir la Cámara de Diputados fue considerada una señal positiva de los políticos chilenos en vísperas de la celebración, este viernes, del Día Internacional de la Mujer.
«Es un momento muy importante para la mujer chilena y para el país. Es el resultado de un largo camino de lucha de las mujeres chilenas por sus derechos», dijo Muñoz, al comentar el acuerdo por el cual ella y la diputada Allende presidirán la cámara baja.
«Agradezco a mis pares masculinos de las bancadas de la Concertación por la madurez, por la sensibilidad y por el cambio político y cultural que han demostrado al elevar a las mujeres a este tan alto cargo de la Cámara de Diputados», añadió.
Desde la constitución en 1813, en los albores de la república, del primer Congreso legislativo en Chile, jamás una mujer había accedido a la presidencia de una cámara, aunque la propia Muñoz fue primera vicepresidenta de los diputados entre marzo y octubre de 1998.
Chile es uno de los países peor situados en términos de participación de la mujer en cargos de gobierno y de representación popular.
Según índices de la Organización de Naciones Unidas de 1997, las mujeres ocupan en Chile solo nueve por ciento de los 168 escaños de diputados y senadores, 16 por ciento de las funciones de ministros, viceministros y otras jerarquías altas de gobierno y nueve por ciento de los cargos en los gobiernos locales.
En lo que respecta al Poder Legislativo, el bajo porcentaje de participación femenina se mantuvo tras los comicios de diciembre, en que se renovaron los 120 escaños de la Cámara de Diputados y 18 de los 38 cargos de elección popular en el Senado.
Las abogadas María Antonia Morales y Mónica Maldonado juraron en noviembre como jueza y fiscal de la Corte Suprema de Justicia, hecho inédito en los 171 años de existencia del máximo tribunal, que era hasta entonces un exclusivo coto masculino.
Muñoz, una socióloga y cientista política de 46 años, casada y con un hijo, representa al distrito número nueve, que comprende siete municipios del llamado Norte Chico de Chile, un área de relativa pobreza que tiene como actividades fundamentales la minería artesanal y pequeñas explotaciones agrícolas y ganaderas.
La nueva presidenta de la Cámara de Diputados estuvo exiliada en Austria desde el golpe de Estado de 1973 hasta 1982. De regreso en Chile, acompañó en 1987 al actual presidente Ricardo Lagos en la fundación del Partido Por la Democracia.
Muñoz fue elegida diputada por primera vez en diciembre de 1989, para el periodo 1990-1994. Volvió al Poder Legislativo en el periodo 1998-2002 y fue reelecta en diciembre último para el periodo 2002-2006.
Fundadora en 1987 del Instituto de la Mujer, Muñoz trabajó también en otras organizaciones femeninas y fue consultora de la División de Desarrollo Social de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
Como legisladora fue autora de un proyecto de la ley sobre violencia intrafamiliar y de una reforma constitucional sobre la igualdad jurídica de todos los hijos, nacidos dentro o fuera de una relación matrimonial. (FIN/IPS/ggr/mj/ip pr/02
