El compositor británico Andrew Lloyd Webber intentará hacer historia otra vez en el barrio londinense de West End, uno de los centros más importantes del teatro mundial, con un espectáculo musical de temática, partitura y artistas indios.
La nueva producción de Webber se titula «Bombay Dreams» (Sueños de Bombay), y abrirá en junio la temporada del teatro Apollo Victoria, con capacidad para 2.200 espectadores.
La música no pertence a Webber, que sólo dirigirá la orquesta, sino a A.R. Rahman, el compositor para cine más renombrado en India. La obra estará protagonizada por una actriz londinense de origen indio, Preeya Kalidas.
Películas de Bombay, la meca del cine indio, también conocida como «Bollywood», se cuentan hace un par de años entre las 10 más vistas en Gran Bretaña, en especial debido a los casi dos millones de inmigrantes de Asia meridional que residen en este país.
Por ese motivo, la empresa de Webber, Really Useful Theatre Company, consideró que un espectáculo en West End con temática india podría atraer a un gran público, aún cuando no sea de interés para la mayoría de los británicos.
Se trata de un importante cambio para Webber, el autor de musicales tan famosos y variados como «Cats», «Evita» y «El fantasma de la ópera».
Parte de la música de Sueños de Bombay ha sido escuchada en otras ocasiones, y parte es nueva. Rahman mezcla en ella las partituras de algunas películas con nuevas canciones, que en total son 20.
La historia transcurre en Bombay, donde un rico productor de cine llamado Madan Kumar conoce por accidente a Akash, habitante de uno de los barrios más pobres de la ciudad, y decide otorgarle un papel en una de sus películas. Pero Kumar es asesinado por la mafia, que quería tomar el control de su empresa, y su hija Priya debe hacerse cargo de los negocios.
El paupérrimo Akash se enamora de la rica Priya, y ésta también de él, pero secretamente, pues está comprometida con Vikram. El día de su boda, Priya se entera que su prometido está vinculado al asesinato de su padre y decide no casarse y unir su destino a Akash.
La idea de la obra surgió cuado Webber conoció en 1999 al cineasta indio Shekhar Kapur, quien dirigió la película «Elizabeth» y ahora prepara otra, sobre la vida del ex presidente sudafricano Nelson Mandela (1994-1999).
«Esperé años para presentar profesionalmente la cultura de la industria fílmica de Bombay en audiencias internacionales», dijo Kapur.
El libreto fue escrito por Meer Syla, y las letras de las canciones fueron solicitadas al ganador del Oscar Don Black, que alcanzó fama por sus creaciones para «El fantasma de la ópera» y películas de James Bond.
Preeya Kalidas obtuvo el papel protagónico del musical luego de cuatro audiciones en 2000. Recibió la buena noticia cuando terminaba de filmar «Bollywood Queen» (Reina de Bollywood), en la que interpreta a una joven india del barrio londinense de East End que sueña con actuar para el cine.
«Es el primer espectáculo de Webber que tiene en su mayoría artistas de origen asiático. Y yo soy la primera mujer asiática que va a interpretar el papel protagónico en un musical de Andrey Lloyd Webber. Esto es fenomenal, y esto va a hacer historia», dijo la actriz a IPS.
La coreografía está a cargo de Farah Khan y Anthony Van Laast, con una vasta trayectoria en el West End. El espectáculo cuenta en total con la participación de 42 artistas y su producción costó 6,3 millones de dólares.
Con todo, «Sueños de Bombay» es todo un desafío para un productor en el duro ambiente del West End. La asistencia a los teatros en ese barrio cayó 15 por ciento en los últimos meses, en especial a causa de la merma de turistas estadounidenses. Y los musicales fueron los que perdieron más audiencia.
Los críticos, que ya lanzaron una campaña hostil contra «Sueños de Bombay», aún antes del estreno, se preguntan cómo hará Webber para atraer la limitada audiencia londinense a un musical sobre otra cultura y con artistas de la industria del espectáculo de India.
La última producción de Webber, «Starlight Express», tuvo 7.406 presentaciones en 18 años, pero «Sueños de Bombay» estará en cartel sólo por un año y, por ahora, las reservas de entradas son escasas.
La Really Useful Theatre Company espera que los indios residentes en Gran Bretaña y los turistas estadounidenses llenen la sala, aunque ese público rara vez visita el West End. (FIN/IPS/tra-eng/ss/sm/rp-ff/cr/02