Los precios del petróleo se situaron al finalizar enero lejos del piso de 22 dólares por barril fijado por la OPEP, pese al recorte de producción y a que la demanda crece tradicionalmente en el invierno boreal.
El Ministerio de Energía de Venezuela confirmó que el precio de la cesta de crudo de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) cerró este viernes a 18,04 dólares por cada barril de 159 litros.
La OPEP, cuyo valor de la cesta es una de las referencias del mercado petrolero mundial, implementó a partir del 1 de este mes un recorte de oferta de 1,5 millones de barriles diarios, junto al retiro de otros 500.000 barriles de Noruega, Rusia, México, Angola y Omán, todos países ajenos a esa organización.
Ese recorte global de dos millones de barriles por día, arduamente negociado, prácticamente ha pasado desapercibido en el mercado internacional, pues no logró empujar los precios del crudo por encima de los 22 dólares por barril como se pretendía.
Los precios tampoco pudieron recuperarse pese al tradicional incremento de la demanda de los países del Norte industrializado durante estos meses de invierno boreal.
El valor promedio del petróleo de la OPEP sólo subió 11 centavos de dólar en enero, primer mes de entrada en vigor del nuevo recorte.
Milko González, especializado en cuestiones petroleras, dijo a IPS que la falta de recuperación de los precios se debe a la sobreoferta evidenciada el año pasado.
Esa abundancia de reservas petroleras, «junto a las temperaturas benignas del invierno en Estados Unidos, permitió aumentar los inventarios de crudo en octubre y noviembre en los países de mayor crecimiento económico y consumo energético», indicó González.
El secretario general de la OPEP, el venezolano Alí Rodríguez, había pronosticado a inicios de mes que los precios comenzarían su recuperación hasta ubicarse en torno a los 22 dólares por barril en las primeras semanas del año.
En la segunda cumbre de la OPEP, realizada en septiembre de 2000 en Caracas, se acordó trabajar en favor de la estabilidad del mercado, diseñando una banda de precios «justos» de entre 22 y 28 dólares por cada barril.
La recesión económica de Estados Unidos y la crisis desencadenada tras los ataques terroristas del 11 de septiembre en Nueva York y Washington contribuyeron a que los precios cayeran en el último trimestre de 2001 por debajo de los 20 dólares el barril.
En tanto, los precios de otros tipos de petróleo, como el estadounidense West Texas Intermediate y el Brent del Mar del Norte, se mantienen prácticamente igual que al finalizar diciembre, los más bajos de los últimos dos años.
El crudo West Texas cerró en enero a 19,62 dólares por barril, mientras que el Brent se ubicó en 19,37 dólares.
Analistas europeos del mercado petrolero consideraron esta semana que la OPEP deberá revisar sus expectativas de precios en la próxima reunión ministerial del grupo, a realizarse en marzo en su sede de Viena.
Una meta más realista en la actual coyuntura sería bajar el nivel mínimo de precios a 19,5 dólares por cada barril, apuntaron varios expertos.
Sin embargo, la OPEP, conformada por Arabia Saudita, Argelia, Emiratos Arabes Unidos, Indonesia, Irán, Iraq, Kuwait, Libia, Nigeria, Qatar y Venezuela, ha recalcado que la actual banda de precios es justa y adecuada, tanto para productores como para los consumidores de crudo.
En tanto, Milko González precisó que, aunque ahora el escenario no luce promisorio, «las proyecciones indican que el crecimiento económico mundial y la demanda energética verán concentrados sus mayores niveles de recuperación en la segunda mitad del año». (FIN/IPS/ac/dm/if/02