El presidente de México, Vicente Fox, visitará Cuba en febrero para relanzar las relaciones entre los dos países, que se mantuvieron tensas al comienzo de su gestión, tras el deterioro registrado en el gobierno de su predecesor, Ernesto Zedillo.
Fuentes de la cancillería mexicana informaron este viernes que Fox visitará Cuba el 3 y el 4 de febrero, acompañado de una amplia comitiva, que incluirá entre otros a Carlos Slim, el empresario más acaudalado de América Latina, a quien le interesa explorar posibilidades de inversión en ese país.
El canciller Jorge Castañeda indicó que Fox mantendrá una extensa reunión con su par cubano, Fidel Castro.
El mandatario cubano asistió en diciembre de 2000 a la asunción de Fox, el primer presidente mexicano que no pertenece al Partido Revolucionario Institucional (PRI) en 71 años.
Esta visita de Fox a la isla de régimen socialista se realizará luego de un periodo de enfriamiento diplomático registrado entre los países durante la administración de Zedillo (1994-2000).
Zedillo realizó fuertes críticas a la situación de los derechos humanos en Cuba y dio un giro en la política exterior de México al permitir que diplomáticos de su país se entrevisten con disidentes cubanos.
Tradicionalmente, las relaciones entre los gobiernos del PRI y el de Castro fueron estrechas. México fue el único país de América Latina que no rompió relaciones con Cuba después de que la Organización de Estados Americanos expulsara a ese país en los años 60.
Además, Castro se preparó en Méxcio para derrocar por las armas en 1959 a la dictadura de Fulgencio Batista.
Cuando Fox llegó a la presidencia prometió mejorar las relaciones entre los dos países, pero en lugar de ello se tensaron por un choque verbal entre Castañeda y su par cubano, Felipe Pérez Roque.
México se abstuvo en abril de 2001 de votar una moción de condena contra Cuba en la Comisión de Derechos de la Organización de las Naciones Unidas.
Sin embargo, Pérez Roque afirmó que Castañeda promovía la moción de condena contra su país y lo acusó de ser una persona con «un conocido historial político de deslealtades».
En su réplica, Castañeda minimizó esas declaraciones y sostuvo que los cubanos estaban «ardidos» (molestos) por la postura de México ante la Comisión de Derechos Humanos.
Las autoridades cubanas le habían negado a Castañeda en el pasado el acceso a archivos de gobierno, cuando investigaba la vida del guerrillero argentino-cubano Ernesto Che Guevara.
«Estamos saliendo de una etapa gris» en las relaciones con Cuba, pero ahora son buenas, declaró el embajador de México en la isla, Ricardo Pascoe.
México es uno de los primeros 10 socios comerciales de Cuba y unas 500 empresas de este país comercian con la isla. Además, unas 50 firmas cubanas tienen representaciones en México.
Las relaciones comerciales entre ambos países vivieron en 1999 uno de sus peores momentos, cuando el intercambio cayó a 236,4 millones de dólares. Sin embargo, en 2000 se incrementaron a más de 350 millones de dólares.
«Vamos por un buen camino (en las relaciones) y ahora estamos ante la posibilidad de desarrollar una nueva relación, con una perspectiva de largo plazo y una visión distinta entre dos naciones que han tenido durante tantos años una vinculación muy honda», declaró Pascoe a periodistas cubanos.
La próxima visita de Fox, que había sido programada inicialmente para el año pasado, será la oportunidad para relanzar las relaciones con Cuba, dijeron funcionarios de la cancillería mexicana.
Pero en Cuba, Fox podría no sólo reunirse con Castro y sus funcionarios, sino que estaría evaluando la posibilidad de mantener un encuentro con la disidencia, a lo que se opone rotundamente el gobierno de la isla, trascendió de fuentes oficiales.
Las últimas visitas de presidentes de México a Cuba fueron la Zedillo, para participar a fines de 1999 de la Cumbre Iberoamericana, y la de Carlos Salinas (1988-1994), quien estuvo nueve horas en junio de 1994. (FIN/IPS/dc/dm/ip/02