Iraq se defenderá si los ataques que Estados Unidos realizó contra Afganistán se amplían a su territorio, advirtió en la capital de Siria el viceprimer ministro iraquí Tariq Aziz.
Antes de reunirse con el canciller de Siria, Farouk Al-Sharaa, Aziz calificó de «chantaje» la declaración del gobierno estadounidense según la cual Iraq constituye una fuente de amenazas a la paz mundial.
Damasco ha sido escena de múltiples visitas de funcionarios estadounidenses desde el comienzo de este año.
Dos grupos de legisladores estadounidenses visitaron Damasco la semana pasada para analizar, con sus pares sirios y otros funcionarios de este país, la campaña mundial contra el terrorismo que conduce Washington, así como el aparente acercamiento de Siria con Iraq.
Autoridades de Estados Unidos advirtieron que se perciben amenazas de ataques con misiles balísticos intercontinentales de Corea del Norte, Irán y posiblemente Iraq antes de 2015.
«¿Quién puede aceptar la idea de que Iraq constituya una amenaza para Estados Unidos. Esto es falso» y no se corresponde con «la realidad y los hechos», dijo Aziz a los periodistas.
«Esta opinión de Estados Unidos no es más que un chantaje. Pero, de todos modos, estamos preparados para todas las posibilidades», agregó el viceprimer ministro iraquí, quien prosiguió su gira luego de reunirse con funcionarios sirios a Rusia y a China.
A comienzos de esta semana, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, dijo que las acciones de su país contra Iraq siguen siendo una opción, pero agregó que no hay apuro para tomar una decisión en ese sentido.
«Iraq está en la escena. Quiero decir que, después de todo, (el gobierno de Saddam Hussein) no permite el ingreso de nuestros inspectores» para investigar la existencia de armas de destrucción masiva en sus arsenales, sostuvo Bush.
Aviones de Estados Unidos y de Gran Bretaña atacaron en dos ocasiones posiciones en el sur de Iraq, la última de esas ocasiones contra baterías antiaéreas.
«Se supone, de acuerdo con la lógica y con las leyes internacionales, que la defensa propia de Estados Unidos debe realizarse en (territorio de) Estados Unidos y no en el de Iraq», sostuvo Aziz.
«Cuando aviones estadounidenses violan nuestro espacio aéreo podrían estar cometiendo una agresión contra Iraq. Por eso, tenemos pleno derecho a defender nuestra soberanía», afirmó.
No hubo declaraciones de funcionarios sirios sobre la visita, de Aziz, que coincidió con la del ministro de Estado de Relaciones Exteriores de Kuwait, Mohammed Sabah Salem Al-Sabah.
Iraq invadió Kuwait en agosto de 1990, lo que dio origen en enero de 1991 a la guerra del Golfo, conducida contra Bagdad por una coalición internacional conducida por Estados Unidos y que integró Siria, entre otros países árabes.
Tanto Aziz como Al-Sabah negaron que Damasco esté mediando entre ambos países en un intento por disminuir las diferencias que persisten desde la invasión.
«Nuestra posición sobre Iraq es nacionalista e inequívoca. Nos oponemos a que cualquier país árabe sea tomado como blanco, sin excepción», dijo el ministro de Información de Siria, Adnan Omran.
Damasco y Bagdad iniciaron en los últimos años un acercamiento para recomponer sus relaciones, interrumpidas cuando Siria se alió con Irán en la guerra contra Iraq (1980-1988).
El comercio entre Iraq y Siria se reanudó en 1997, y las exportaciones sirias saltaron de un total de 500 millones de dólares entre 1997 y 2000 a 1.000 millones de dólares en 2001, y se calcula que se duplicarán este año.
A cambio, Iraq exporta petróleo a Siria. Un analista indicó que Siria recibe 125.000 barriles por día de petróleo iraquí para consumo interno, lo cual la habilita a exportar 340.000 barriles diarios de su propio petróleo. Estas expotaciones representan 60 por ciento de su comercio exterior. (FIN/IPS/tra-en/mn/mj- lp/ip/02