Suriname se prepara para jugar un papel destacado en la lucha contra el narcotráfico en el Caribe, un área que se perfila como destino de traficantes europeos y punto de trasbordo de drogas llevadas a Estados Unidos.
El Caribe fue tradicionalmente una estación de paso en la ruta de conexión entre productores sudamericanos de estupefacientes y los mercados estadounidense y europeo.
El creciente comercio ilegal de éxtasis en el territorio de Suriname alertó al gobierno, que mantiene negociaciones con la agencia antidrogas estadounidense (DEA) con la intención de instalar una oficina en Paramaribo.
En el pasado, los agentes antidrogas surinameses operaban para detener a compatriotas y ciudadanos holandeses que intentaban contrabandear cocaína en vuelos sin escala hacia Holanda, potencia colonial en Suriname hasta 1975.
Pero ahora la principal preocupación de Johannes Arduin, jefe del departamento de Narcóticos, es el comercio ilegal de píldoras de éxtasis enviadas desde Amsterdam a Suriname, a veces a través de islas como Aruba.
Parte de las píldoras abastecen el consumo local y parte siguen viaje al meridional estado de Florida, en Estados Unidos.
A comienzos de diciembre, la policía de Miami, Florida, desbarató una red que pretendía hacer ingresar más de 100.000 píldoras de éxtasis.
En junio, las autoridades antidroga surinamesas cooperaron con la DEA en un operativo que detuvo a una organización con sede en Florida para el comercio ilegal de cientos de miles de píldoras para venta a estadounidenses, sobre todo en discotecas. Las personas detenidas son 26, y enfrentan cargos de contrabando.
El principal periódico de Suriname, De Ware Tijd, citó cifras oficiales e informó sobre la confiscación en 2000 de 10.054 píldoras, la mayoría en el principal aeropuerto, pero destacó que en 2001 el número de pastillas ascendió a 80.000.
La mayoría de los narcotraficantes detenidos son surinameses u holandeses que intentan abordar, desde Suriname, vuelos internacionales hacia Estados Unidos.
«Los funcionarios de aduanas lograron mucha experiencia y pueden identificar a potenciales traficantes», dijo Roy Zscusschen, a cargo del grupo antinarcóticos especializado en aduanas.
Autoridades de Suriname, país de 450.000 habitantes en la costa caribeña de América del Sur, alertaron sobre la creciente presencia de la droga en el país, donde aumenta el consumo entre jóvenes y adultos de las clases media y alta.
Según informes de prensa, la policía de Aruba incautó más de 73.800 píldoras de éxtasis en 2001. La mayoría iba destinada a Estados Unidos, y se cree que la mitad llegó a través de Suriname.
En un cuatrimestre, detectives antinarcóticos de Suriname confiscaron 58.286 píldoras y ocho paquetes de tres kilos de éxtasis cada uno.
En un operativo a comienzos de diciembre en Florida, agentes de la DEA y el Buró Federal de Investigaciones (FBI), junto a la policía del condado de Dade, registraron la residencia de la ex estrella del fútbol estadounidense O.J. Simpson, quien mantuvo una conversación telefónica con un sospechoso de narcotráfico cuya línea telefónica había sido interceptada.
Simpson, que a mediados de los años 90 fue absuelto del cargo de asesinato de su esposa, no fue acusado tras el operativo antidrogas. (FIN/IPS/tra-en/bw/aa/lp/mlm/ip/02
