El gobierno y exportadores de Colombia esperan con optimismo la prórroga y ampliación del acuerdo de preferencias arancelarias otorgadas por Estados Unidos a los países andinos para impulsar la lucha antidrogas, que vence este martes.
La ministra de Comercio Exterior, Marta Ramírez, se manifestó confiada de que el Senado estadounidense transforme en ley antes del 15 de este mes, cuando finalizan las sesiones anuales, el nuevo Tratado de Preferencias Arancelarias Andinas, ATPA por sus siglas en inglés, ya aprobado por la Cámara de Representantes.
Ramírez precisó que la prórroga y ampliación del ATPA tendrá una repercusión importante en todos los países de la región, pero muy especialmente en Colombia, donde se aguarda la creación de 700.000 nuevos empleos y un aumento de las exportaciones.
La expectativa por la aprobación del tratado aumentó este martes, debido al vencimiento anual del tratado que fuera aprobado en 1991 por Estados Unidos para apoyar el combate contra el narcotráfico, otorgando beneficios arancelarios a las importaciones andinas.
El Comité de Finanzas del Senado estadounidense aprobó el proyecto el jueves pasado y el paso siguiente es el visto bueno en sesión plenaria, que se espera ocurra entre esta y la próxima semana.
El ATPA fue aprobado por Estados Unidos en 1991, con el objetivo de facilitar el ingreso de un grupo importante de productos andinos para estimular la creación de empleos y abrir caminos alternativos a los cultivos de coca.
La ley estadounidense comenzó a regir en 1992 para los productos procedentes de Bolivia y de Colombia y se extendió en abril de 1993 a Ecuador y en 1994 a Perú.
El gobierno colombiano de Andrés Pastrana precisó que en los primeros años de vigencia del nuevo tratado, que se prorrogaría hasta 2006, se podrán crear unos 200.000 nuevos puestos de trabajo sólo en el sector de confecciones de ropa.
El acuerdo de preferencias andinas vigente hasta este martes cubre 5.550 partidas arancelarias, pero su ampliación permitirá incorporar 650 más, con lo que se llegará a 80 por ciento del total de los productos exportados por Colombia al mercado estadounidense.
«Estamos muy agradecido» por la buena recepción del gobierno estadounidense de George W. Bush y de los congresistas de ese país, «que entendieron el pedido de urgencia que hizo el presidente Pastrana para agilizar el trámite del proyecto de ley, apuntó Ramírez.
Por su parte, Javier Díaz, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores (Anbaldex), dijo a IPS que el ATPA ha tenido en sus 10 años de vigencia un impacto muy positivo en la economía del país.
Díaz agregó que uno de los sectores con mayor desarrollo gracias al tratado de preferencias fue el floricultor, del que Colombia es uno de los mayores exportadores latinoamericanos.
Las estadísticas del Ministerio de Comercio Exterior indican que el comercio con Estados Unidos creció en 70 por ciento en los últimos ocho años.
Las ventas de los productos incluidos en el ATPA pasaron de representar tres por ciento de las exportaciones a Estados Unidos a 12,4 por ciento entre 1991 y el año pasado.
La ministra Ramírez puntualizó que la prórroga y ampliación del acuerdo permitirá crecer la producción de confecciones textiles, de atún, manufacturas y artículos de cuero y calzado, así como de algunos derivados de petróleo que no gozaban de las preferencias arancelarias hasta ahora.
Bush se comprometió en febrero de este año ante Pastrana a apoyar la prórroga y extensión del tratado de preferencias arancelarias andinas.
En esa oportunidad, Bush aseguró que los beneficios que se otorgan a los países andinos vinculados a la lucha antidrogas a través del ATPA son muy importantes e indispensables «para que sus economías puedan crecer».
Colombia pidió la ampliación de los beneficios para todos los productos, un beneficio similar al que Washington brinda a América Central y el Caribe, por medio de un acuerdo que entró en vigor a fines del año pasado.
Estados Unidos es el principal socio comercial de Colombia, que en 2000 exportó 6.613 millones de dólares, 14,4 por ciento más que el año anterior, un volumen que significó cerca de 50 por ciento del total de las ventas externas colombianas.
En tanto, las importaciones de Colombia procedentes de Estados Unidos sumaron 4.329 millones de dólares el año pasado, frente a 4.213 millones de dólares en 1999. (FIN/IPS/yf/dm/if/01