«Más allá de las estrellas» es el nombre del primer disco de Juan Diego Alarcón, un niño ecuatoriano de 14 años afectado de distrofia muscular que, desde una silla de ruedas, quiere iniciar su carrera como cantante profesional.
La grabación fue lanzada en los días de Navidad en Chile, país donde Alarcón reside con sus padres hace más de una década y que le permitió darse a conocer en 2000, cuando cantó en el cierre de la Teletón.
La Teletón, una maratón de televisión organizada casi todos los años por Mario Kreutzberger, conocido internacionalmente como Don Francisco, permite recaudar fondos para los centros de rehabilitación de discapacitados que mantiene la fundación creada por el empresario y animador televisivo.
El sello discográfico Warner Music, productor del disco, maneja la posibilidad de que Alarcón grabe en el futuro a dúo con artistas famosas, como las estadounidenses Christina Aguilera, Mariah Carey o Whitney Houston.
Al niño ecuatoriano se le detectó a los cuatro años una distrofia muscular congénita, enfermedad que a partir de un déficit permanente en la producción de la respectiva enzima le va haciendo perder fuerzas progresivamente.
Fue a raíz de esa dolencia que sus padres, Gonzalo Alarcón y María Soledad Valencia, decidieron trasladar su residencia a Chile para que el niño fuera atendido regularmente en los centros clínicos de la Fundación Teletón.
Alarcón comenzó a los 10 años a desarrollar sistemáticamente su talento como cantante, estimulado por su madre, en reuniones con amigos y familiares.
Sus cualidades quedaron ratificadas cuando obtuvo el segundo lugar en el programa-concurso «Nace una estrella», del Canal 13 de Televisión de Santiago.
También participó en concursos musicales estudiantiles y tomó clases en la academia musical de Alicia Puccio, una de las más prestigiosas de Chile.
El niño se presentó el año pasado en los programas «Sábado gigante», de Don Francisco, y «Bravo, bravísimo», ambos de Canal 13, al tiempo que montó un espectáculo especial para los menores con parálisis cerebral que son atendidos en la Fundación «Alter Ego».
Con esos antecedentes, sumados a su condición de discapacitado, fue convocado para cantar ante 80.000 personas que llenaron las graderías del Estadio Nacional de Santiago, en diciembre de 2000, en oportunidad del cierre de la Teletón.
Su interpretación del clásico «Himno de la alegría» puso de manifiesto su excelente registro vocal y fue el precedente para que se atreviera a ingresar al mundo de los cantantes profesionales.
Un profesionalismo, en todo caso, relativo, ya que debido a su edad debe continuar los estudios que interrumpió parcialmente en el International Preparatory School, donde cursa el octavo año de la enseñanza básica.
La grabación de «Más allá de las estrellas» le significó un arduo trabajo de seis meses. El álbum cuenta con 13 temas, de los cuales siete son covers (temas de otros artistas) y seis canciones inéditas del compositor Francisco Becker.
Una de las canciones del disco se titula «Toma una esperanza», del cantautor chileno Alberto Plaza, quien lo invitó también a cantar junto a él hace algunos meses, en una presentación en el puerto ecuatoriano de Guayaquil.
El Congreso de Ecuador condecoró a Alarcón, considerándolo un ejemplo de superación. Su caso aparece incluso mencionado en textos de enseñanza básica de su país, como una muestra de que es posible sobreponerse a las adversidades.
Desde los privilegiados escenarios de la Teletón y de «Sábado gigante», el niño se ha dado a conocer, además de Chile y Ecuador, en el resto de América de habla hispana. «Incluso, me ubican en lugares tan distantes como México y Panamá», dijo Alarcón al diario La Nación, de Santiago.
El próximo paso artístico del niño ecuatoriano discapacitado será en febrero en la jornada inaugural del Festival de la Canción de Viña del Mar, de Chile, cuya versión 2002 tendrá como emblemas la paz y la unidad. (FIN/IPS/ggr/dm/cr/01